La columna Globoaterrada de Emilio Hernández|¡Cheverito, ayúdame con esto! (Opinión)

Como sabes, nuestro eterno Comandante nos exhortó a ser radicales, esto es, a ir a la raíz de cada asunto. La raíz de la miseria de hoy día, por ejemplo, es el sistema capitalista. Eso lo saben hasta los opositores, pero se hacen los locos.

Cheverito, tú que has paseado por playas y montañas, seguro has visto miles y miles de botellas, latas y bolsas de chucherías, regados por doquier.

El problema de la basura es que no se ataca en su raíz, o sea, no somos radicales en este asunto.

La raíz del grave problema de la basura en Venezuela es el culto enfermizo a lo desechable. Es uno de los peores males del capitalismo salvaje, depredador de la naturaleza cuando produce y depredador contaminándola.

Nuestro Comandante también nos exhortó a entender bien las matemáticas. ¿Qué porcentaje del volumen de una bolsa de basura es aire contenido en los envases desechables que están adentro? Un porcentaje muy alto. Las matemáticas, que no la fe ciega, nos muestran que si no hubiera tantos envases desechables, habría menos bolsas de basura que recoger.

Amigo, ayúdame con la prédica de que hay que hacerle la guerra a lo desechable. Los refrescos, las cervezas, incluso el agua potable, deberían venderse en envases retornables, como era antes de que tu nacieras.

Los envases retornables suelen ser de vidrio, pero pueden ser plásticos. Los botellones de agua de 20 litros son plásticos y retornables ¿no?

Se pueden tomar medidas creativas sencillas para inducir el cambio.

Por ejemplo, sería interesante que las empresas de alimentos y bebidas estén obligadas a recibir sus botellas desechables y sus latas, incluso sus bolsitas de chucherías, pagando por ellas una suma que no puedan obviar. Además, lo desechable debería tener un IVA astronómico para conminar a productores y consumidores a volver a la sana costumbre de usar envases retornables.

Cheverito, tú sabes que la basura es uno de los principales problemas del turismo. Y eso no es nada al lado de las consecuencias en salud que puede traer. Este problema es tan importante como otros, que percibimos como más urgentes.

T/ Emilio Hernández
emiliofhg@gmail.com