Cuatro movimientos telúricos de baja y moderada intensidad registró este martes la Red Sismológica Nacional en el estado Mérida, región andina del país.
Fueron eventos con magnitudes de 4.2; 2.7; 3; y 3.1, ocurridos entre las 12:05 del medio día y la 1:20 de la tarde.
El movimiento telúrico de mayor intensidad (magnitud 4.2) se produjo 20 kilómetros al sureste de la ciudad de El Vigía, informó la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas, a través de su cuenta oficial en Twitter (@Funvisis).
En la capital merideña, el director de Protección Civil, Gerardo Rojas informó que los eventos de este martes no ocasionaron daños adicionales a los contabilizados tras el sismo de magnitud 5,1 registrado el sábado 7 de noviembre, a las 2:28 de la madrugada.
«Nuestra Sala de Evaluación Técnica Integral de Riesgos lleva un registro sistemático de los eventos sísmicos y de todos los aspectos vinculados. El día sábado se registraron 35 movimientos sísmicos, el día domingo, 19; y el día, lunes 20. De estos 74 eventos, 34 fueron de muy baja intensidad, 32 se ubican en el renglón de baja intensidad, siete son clasificados como moderados y uno como sismo de alta intensidad», detalló.
La presidenta de Funvisis, Aura Fernández, hizo un llamado a la calma ante hechos de esta naturaleza, que «son normales en Venezuela, ya que este es un país sísmico», reseñó una nota de prensa difundida en el portal web de Funvisis.
La institución exhortó a la población a promover la cultura de prevención sísmica con miras a reducir la vulnerabilidad en todas las comunidades.
AFECTACIONES
El director estadal de Protección Civil informó que el balance de afectaciones da cuenta de 33 viviendas con daños considerables, mientras que otras 84 y un edificio público registraron afectaciones parciales, todos en el municipio Sucre.
Detalló que los técnicos evaluadores de esa institución han inspeccionado 106 edificaciones, donde habitan 142 familias: específicamente 290 adultos, 165 niños y 67 adultos mayores.
Nerio Ramírez, técnico en evaluación riesgos y geógrafo adscrito al Instituto de Protección Civil y Administración de Desastres (Inpradem), puntualizó que la intensa actividad geodinámica ha afectado sobre todo a viviendas y edificaciones construidas con materiales inadecuados o que son de muy vieja data, como adobe y tapia, o ubicadas en pendientes o terrenos saturados de humedad.
Acotó que en el ámbito de la geofísica, se considera que la liberación progresiva y gradual de energía acumulada entre placas tectónicas es benéfica y evita liberaciones masivas de energía en forma de temblores o terremotos.
«Todo movimiento sísmico esta vinculado con la geodinámica interna de la tierra, es decir, con el choque o movimiento de las placas tectónicas. En el ámbito del municipio merideño de Sucre, el sistema de la Falla de Boconó es muy dinámico, y en esta oportunidad está liberando energía en forma de sismos y réplicas», señaló.