57.239 kilogramos de productos cárnicos en estado de descomposición hallados por la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos y la Zodi Miranda en las distribuidoras de alimentos Biangi Mar y Avicomar C.A, ubicado en Los Teques, estado Miranda, serán destinados como materia prima a empresas que elaboran alimentos para animales.
Esa cantidad de proteínas, compuesta por 19.438 kg pescado y 37.781 de pollo y gallina, fue comisada hace 15 días. El Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria analizó dicha mercancía y, luego de realizar las pruebas correspondiente, se determinó que los productos cárnicos están aptos solo para el consumo animal mediante procesamiento, por lo que la mercancía se entregó a una empresa procesadora de alimentos para animales.
La empresa vendía el pollo entero a 2.125 bolívares el kilo, con un margen de ganancia especulativo de 150%, cuando el precio regulado es 850, 37 bolívares.
En el lugar también fueron comisados 7.057 unidades de bombillos pertenecientes a la misión energética y 41 unidades de cauchos de varias marcas y medidas para el parque automotor de la empresa.
Este hallazgo forma parte de las acciones de la Gran Misión Abastecimiento Soberano, que combate la especulación, el acaparamiento y el sobreprecio.
El general de División de la Zodi Miranda N°43, Pedro Álvarez Bellorín, destacó que en esta segunda jornada de inspección y verificación, en la que también participan Sunagro, Frente Francisco de Miranda e Inspectoría de Trabajo, se detectó alto grado de insalubridad en los productos cárnicos que comercializa esta empresa privada a precios especulativos.
«La Contraloría Sanitaria dictó una medida para un cierre técnico de 120 días para que se colocaran en condiciones de salubridad estas instalaciones. Cuando comenzamos a indagar en esta empresa, nos encontramos con una gran cantidad de pescado de diferentes especies, pollo y gallinas con grados de insalubridad. Es lamentable encontrar estos alimentos porque cuántas familias se pudieron haber favorecido con estos alimentos», dijo.
Sostuvo que los clientes de esta comercializadora «eran empresas VIP, llámese restaurantes y grandes corporaciones que compraban los productos con un margen de ganancia especulativo de hasta el 346 %. El pollo, que está regulado a 850 bolívares, lo venden hasta en 6.000 y 8.000 bolívares el kilo», señaló.
Explicó que las pruebas realizadas por parte del Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria arrojaron la presencia de las bacterias aerohius mesófilos, escherichia coli y salmonella spp en los productos cárnicos.
«Estos productos no están actos para el consumo humano, esta empresa tenía 57.239 kilogramos de proteína animal en condiciones descompuestas, que pudo haber sido aprovechada para el consumo humano pero debido a las condiciones encontradas se contaminaron», explicó.
Anunció que estos alimentos serán destinados a una empresa procesadora llamada E&A en el estado Aragua y las investigaciones sobre la empresa continuarán debido a que no se ha dado con el paradero del dueño de la comercializadora privada de alimentos, Antonio Henrique Do Santos.
«Queremos hacerle las preguntas jurídicas correspondientes y verificar si hay delito cometido. Además de estas irregularidades, conseguimos en un sótano 7.057 bombillos de la Misión Energética. Corpoelec comunicó que no existe ningún tipo de documento donde se justifique la asignación de este material. Este es un bombillo adquirido por el Gobierno nacional para regalárselo al pueblo», dijo.
Indicó que el Gobierno nacional y la Inspectoría del Trabajo velarán porque los derechos de los trabajadores de ambas empresas sean respetados.