El alcalde amenazó con suspender todos los servicios públicos de la urbe|Roma al borde de la quiebra

Roma, capital italiana, está al borde de la quiebra y el Parlamento rechazó concederle una ayuda financiera especial, por lo que el alcalde de esta ciudad, Ignazio Marino, amenazó con suspender todos los servicios públicos de la urbe capitalina.

La herencia que dejó el exburgomaestre romano (Gianni Alemanno) para Marino, quien administra la capital italiana desde el pasado junio, es un déficit presupuestario de 816 millones de euros.

En el caso de que Roma no logre superar el déficit, podría ser puesta bajo tutela de administración; lo que superaría solo con medidas drásticas. “Roma ha malgastado el dinero durante décadas. No pienso gastar ni un solo euro que no esté presupuestado”, declaró Marino en respuesta a las críticas de los parlamentarios que se negaron a votar a favor de la ayuda financiera especial para la entidad.

En la solicitud, Roma preveía una financiación gubernamental como una compensación suplementaria consecuencia del rol de capital en el país europeo. El alcalde capitalino recordó que el nuevo primer ministro Matteo Renzi había prometido tomar medidas urgentes para ayudar a la capital.

Marino advirtió de que si no se encuentra de inmediato una solución para este problema, los autobuses podrían dejar de circular a partir del próximo domingo y la recolección de basura será suspendida.

“Con el dinero que disponemos en el presupuesto de hoy en día, puedo reparar una calle de Roma cada 52 años. Eso no es precisamente lo que llamo mantenimiento”, dijo el alcalde romano.

T/teleSUR
F/Archivo