La alcaldía del municipio Caroní, en el estado Bolívar, aprobó una partida de 2,5 millones de bolívares para la reparación de los semáforos y postes de iluminación que han sido destruidos por grupos violentos de la derecha durante las guarimbas realizadas en las últimas semanas en las parroquias Universidad y Unare de Ciudad Guayana.
El alcalde socialista de la mayor ciudad del suroriente venezolano, José Ramón López, recordó que desde el pasado 12 de marzo grupos violentos afectos a la oposición iniciaron una serie de cierre de calles y avenidas, incendio de cauchos y basura y acciones de terror contra vecinos y trabajadores para impulsar un estallido social en el país.
Señaló que ante el creciente repudio a estas acciones por parte de la población y el despliegue de las autoridades policiales para recuperar el paso por las avenidas, los violentos comenzaron a arrancar árboles de las avenidas y tumbar semáforos y postes de alumbrado con el fin de trancar el paso en varios sectores de clase media y alta de la zona de Alta Vista, así como en avenidas principales de la parroquia Unare.
«En total se han destrozado más de 200 árboles y hemos sufrido la destrucción de numerosos semáforos, casetas de control, postes de alumbrado y otros equipos que forman parte de los servicios públicos», señaló.
Acotó que estas acciones demuestran de manera clara que no existe ningún tipo de «protesta pacífica», como pretenden hacer ver los grupos de derecha y los medios privados, sino que se trata de una acción de terrorismo y destrucción claramente orientado a amedrentar a las familias y a impedir que estas vayan a sus trabajos, empleos, mercados y comercios.
El alcalde recordó además que la municipalidad mantiene un fuerte despliegue de trabajadores y equipos para recoger diariamente la basura y escombros colocados por los violentos en algunas calles del oeste de Ciudad Guayana.
«No vamos a permitir que un pequeño grupo secuestre a nuestra ciudad. Aquí hay un gobierno municipal que trabaja para hacer respetar el derecho de la población al libre tránsito y a la paz y seguridad», recalcó al tiempo que señaló que la reparación de los semáforos y postes se hará de manera inmediata y se contará con el apoyo de las comunidades organizadas para denunciar cualquier tipo de amenaza contra estos equipos.
«Se han dañado muchas propiedades públicas y también privadas. Los autores son ciudadanos que no aman su ciudad ni respetan a sus vecinos. Cada día crece el repudio y el odio de las comunidades hacia estos grupos y los mismos vecinos se están organizando para hacer respetar sus espacios contra estos ataques», recalcó.