Unidades del Ejército Árabe Sirio lograron este domingo detener intentos de infiltración de grupos irregulares armados en zonas cercanas a la frontera con el Líbano.
Según reportes militares, en las últimas horas los efectivos de las Fuerzas Armadas abatieron varios grupos extremistas islámicos que pretendían avanzar hacia las llanuras de al-Zabadani, al oeste de la ciudad de Rankous (Damasco, capital), así como en zonas adyacentes de la localidad libanesa de Al-Tfeil.
Tras los combates, según la fuente, se logró restablecer la seguridad en esa área sureña de los montes del Qalamoun, al noroeste de Damasco.
Por otra parte, en la norteña provincia siria de Alepo las tropas gubernamentales abatieron grupos irregulares armados en los pueblos de Hreitan, al-Lairamun, Khan Al-Assal, Andan, Mare, Tal Rifaat y al-Mansura, causando numerosas bajas y destruyendo varios refugios subterráneos.
Asimismo, en la central provincia de Homs, las fuerzas gubernamentales causaron numerosas bajas a los armados en combates realizados en las fincas de al-Waer, y en al-Rastan y el campo de Palmira.
En operaciones efectuadas en la provincia de Latakia, en el norte de Siria, los efectivos de Damasco hostigaron agrupaciones de irregulares en las regiones del monte de Kouz, así como en las localidades de Shilaf, Beit Iblek, Deir Hanna, Sakiat al-Kart, Ketef al-Ruman.
Entre las bajas causadas a los extremistas islámicos se cuenta un jefe del Frente Al-Nusra, rama de la red Al-Qaeda en Siria.
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, presentó el pasado viernes 20 de junio un plan de seis puntos para resolver el conflicto. El vocero solicitó al Consejo de Seguridad que imponga un embargo de armas a Siria.