El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, expresó este domingo, su agradecimiento en nombre del pueblo venezolano, al jefe de estado boliviano, Evo Morales y a su país, por la visita realizada a la Guajira venezolana y por la ayuda humanitaria que la nación del altiplano donó, como gesto solidario con los ciudadanos venezolanos perjudicados por el temporal.
«Es un gesto muy noble de Evo que agradecemos en el alma (…) sólo quiero a nombre de todo el pueblo venezolano, el pueblo indígena del Zulia darle las gracias a Evo por estar aquí. Hoy llegaron con Evo 50 toneladas de arroz boliviano y es el tercer avión enviado desde ese país hermano», dijo el Mandatario venezolano, desde el fuerte Mara, ubicado en el estado Zulia.
Indicó, que este gesto se enmarca dentro del principio de solidaridad que fundamenta a los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba). En ese sentido señaló que «es el Alba que retoma la ofensiva en la solidaridad y el amor».
Agradeció a todos los países de la Alba por las ayudas enviadas hacia el país, así como a naciones como Rusia, Bielorrusia y Brasil por el gesto humanitario.
Acotó, que ya las naciones suramericanas no son países solitarios, «como nos acostumbraron los neoliberales, que visualizaron al pueblo como mendigos, ya no somos mendigos, somos rebeldes, hemos sacado nuestra propia fibra», aseguró Chávez.
Enfatizó, que si hay alguien que merece todos los reconocimientos en estos tiempos en la lucha indígena, por su valor coraje, inteligencia entre los pueblos indígenas es el compañero Evo Morales Ayma.
SOLDADOS AL SERVICIO DEL PUEBLO
Por otra parte, el Dignatario nacional destacó la actuación de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), en el Fuerte Mara frente a la emergencia.
Al respecto recalcó «aquí vinieron miles de afectados salvándose de una muerte segura, que los hubiera agarrado en los medanales y este fuerte se abrió para el pueblo. Por eso aplaudo y felicito a nuestra Fuerza Armada Nacional Revolucionaria».
La Guajira venezolana sufrió graves daños ocasionados por los desbordamiento de los embalses Manuelote y Tulé a consecuencia de las intensas lluvias que cayeron en esa región occidental de la geografía venezolana.