Gobierno propone diálogo con mediación de la Iglesia|Continúan manifestaciones en Chile por alza en el precio del gas doméstico

Este jueves continúan las intensas movilizaciones y protestas en la región de Magallanes al sur de Chile en contra de la medida anunciada por el presidente de ese país, Sebastián Piñera, de aumentar el precio del gas doméstico en un 17 por ciento, decisión ha sido rechazada por la gran mayoría de los pobladores de una de las zonas más frías del país, donde el preciado combustible es vital para el funcionamiento de los sistemas de calefacción.

Las miles de personas que fueron convocadas por la Asamblea Ciudadana de Magallanes, bloquearon nuevamente desde la mañana de este jueves los principales accesos a la austral ciudad de Punta Arenas, capital magallánica situada a unos tres mil kilómetros de Santiago y epicentro de las manifestaciones, apoyadas también por los pobladores de las comunas de Porvenir y Puerto Natales.

Caravanas de vehículos, cacerolazos, barricadas, marchas, banderas negras desplegadas por toda la ciudad y cierres de los comercios e instituciones públicas y privadas marcan el ambiente en la mencionada urbe, situación que mantiene en difícil encrucijada al Ejecutivo chileno.

PIÑERA PROPONE DIÁLOGO

En un intento de aliviar las tensiones, la administración presidida por Sebastián Piñera anunció en la noche de este miércoles el comienzo de una instancia de diálogo con la comunidad magallánica a través de la mediación del obispo de Punta Arenas, Bernardo Bastres.

El subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, representará al Gobierno en un primer encuentro este jueves con la autoridad eclesiástica, quien ha respaldado hasta el momento las demandas de la ciudadanía de la helada Patagonia chilena.

A juicio del alcalde de Punta Arenas, Vladimiro Mimica, el conflicto originado en el sur de Chile responde a una mirada técnica por parte del Ejecutivo hacia un asunto que requiere ser visto con una óptica de Estado, dada la importancia geopolítica de la región de Magallanes.

En tal sentido, Mimica criticó el centralismo de las políticas gubernamentales que asfixia a las regiones extremas del país y recordó que la vida en Magallanes es mucho más cara que en cualquier otro lugar de Chile.

Recalcó, además, que la subida del gas tendrá un efecto multiplicador insoportable para la ciudadanía, al influir en el alza del pan, en el transporte, en la energía eléctrica y en la cada vez más pobre educación municipalizada.

Fuente/Prensalatina
T/CO