El Tratado sobre Comercio de Armas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) entrará en vigor este miércoles marcando el inicio de una nueva era en los intentos para frenar el flujo de armamento a zonas de conflicto, señaló este martes la organización.
“Esto supone el inicio de un nuevo capítulo en nuestros esfuerzos colectivos para llevar responsabilidad y transparencia al comercio global de armas”, señaló en un comunicado el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
El tratado, aprobado por una mayoría de la Asamblea General de la ONU en abril de 2013, entrará en vigor noventa días después de que el país número cincuenta procediese a su ratificación, tal y como establecía el texto.
A día de hoy, 130 países han firmado el compromiso y 60 de ellos lo han ratificado, incluidos varios de los principales exportadores de armas del mundo, como Francia, el Reino Unido, Alemania y España.
Entre tanto, Estados Unidos, el principal fabricante a escala mundial, ha estampado su firma en el tratado, pero aún no lo ha ratificado.
La entrada en vigor del texto supone que los Estados firmantes tendrán a partir de ahora la obligación jurídica de aplicar sus provisiones, que regulan la venta de todo tipo de armas, desde las más pequeñas a tanques, aviones o misiles.
El tratado, el primer gran acuerdo armamentístico desde el aprobado en 1996 para la Prohibición de las Armas Nucleares, busca promover la paz y la seguridad a través del freno a los flujos de armas a zonas de conflicto, favoreciendo de paso el respeto a los derechos humanos.
Según destacó hoy Ban, la velocidad con la que el texto ha entrado en vigor, menos de dos años después de su aprobación, es prueba “del compromiso de los Estados, las organizaciones internacionales y la sociedad para terminar con el comercio irresponsable de armas“.
El diplomático surcoreano consideró fundamental seguir promoviendo la participación de más países en la convención y llamó a todos los Estados que no se han sumado a que lo hagan.