Por Ramón A. Contreras|La burguesía (Opinión)

Carlos Marx y Federico Engels señalaron con precisión en el siglo XIX el diagnóstico de la sociedad burguesa. Los conflictos que ella planteaba y la historia de la lucha de clases, como elemento transversal de las relaciones humanas. En nuestro país, una los sectores opositores suelen decir que antes del presidente Hugo Chávez “éramos felices, que todos nos queríamos como hermanos y que en Venezuela no había divisiones, que fue el Comandante el que las creó”.

Esa mentira repetida, cimentada en la acusación de que Chávez atizaba con lenguaje de odio y promotor de la violencia su accionar político. Esa afirmación, que no tiene sustento alguno, es una acusación ante un espejo.

El odio lo ha fomentado históricamente la burguesía contra el pueblo. El desprecio de los que más tienen hacia los pobres, es un hecho de una recurrencia histórica innegable.

El proceso de migración campesina que vivió Venezuela durante todo el siglo XX, generando la congestión urbana que hoy padecemos en las grandes metrópolis del país, ya lo alertaban Marx y Engels: “La burguesía somete el campo al imperio de la ciudad. Crea ciudades enormes, intensifica la población urbana en una fuerte proporción respecto a la campesina y arranca a una parte considerable de la gente del campo al cretinismo de la vida rural. Y del mismo modo que somete el campo a la ciudad, somete los pueblos bárbaros y semibárbaros a las naciones civilizadas, los pueblos campesinos a los pueblos burgueses”.

Entonces, lo que hoy vivimos, la crisis actual, no es más que la arremetida violenta de la burguesía contra el pueblo, que no tolera en el poder a un trabajador, como nunca toleraron a “El Arañero” y militar patriota. Son más importantes las papas de una cadena de comida rápida, que nuestro petróleo tenga un precio justo.

Está claro: la burguesía no dará tregua al gobierno del presidente Nicolás Maduro. Ellos necesitan acabar con Maduro para matar a Chávez. Por eso, que la esposa del preso de Ramo Verde diga que “Maduro traicionó el legado de Chávez” y que Henrique Capriles nos llame “camaradas”, indica claramente que tienen una estrategia: construir simbólicamente una afinidad con el chavismo, mientras siembran el caos.

@aliriocontreg