“Cuando vi en televisión lo que pasaba el 4 de febrero de 1992 en la ciudad de Caracas, y oí las palabras de ese joven teniente coronel llamado Hugo Chávez Frías, inmediatamente me identifiqué con él. Su discurso era diferente, firme, decidido y responsable”, así se refirió el mayor general (r) Nguyen Van Linh, una persona muy respetada en Vietnam, por estar al frente de la Asociación de las Víctimas Vietnamitas del Agente Naranja/Dioxina (VAVA, siglas en inglés).
Su labor como Presidente de VAVA es reconocida en todo el mundo, incluyendo Estados Unidos, por su incansable labor a favor de los derechos de los millones de vietnamitas afectados por los ataques químicos de la aviación estadounidense.
Durante el acto conmemorativo del 4-F, efectuado en la capital vietnamita, el general Van Linh, expresó, además, que la acción de 1992 puso de manifiesto universalmente el carácter un inhumano de la política neoliberal que golpeaba a Latinoamérica y en particular a Venezuela.
Por su parte, el vicepresidente permanente de la Asociación de Amistad Vietnam/Venezuela y ex embajador de Vietnam en Cuba, Pham Tien Tu, afirmó que desde La Habana siempre estuvo atento a la realidad política venezolana, y así pudo comprender claramente las causas y consecuencias del 4-F: “El Caracazo rebeló, sin duda alguna, el desastre que significó para el pueblo venezolano las políticas neoliberales aplicadas por Estados Unidos en América Latina”.
Precisó, que el 27-F de 1989, reveló que las masas populares estaban en ese momento en condiciones de emprender la lucha para cambiar la situación crítica del país: “Por esas razones el pueblo venezolano comprendió el 4-F que Chávez era el líder para conducir la lucha por la nueva independencia de Venezuela”.