La circulación de vehículos volvió este miércoles a la carretera entre Damasco y Beirut tras reparar el tramo de la vía que fue bombardeado por Israel a principios de octubre pasado.
La gobernación de Damasco-Campo publicó imágenes del trabajo que hacen sus vehículos pesados para rellenar los enormes cráteres que dejaron fuera de servicio la autopista entre ambos lados de la frontera.
Por otro lado, la gobernación de Homs comenzó las obras de levantar los escombros y remover los restos de la agresión que afectó los cruces de Joussieh y Jiser Qamar, bombardeados en tres ocasiones por el ejército israelí.
El trabajo incluye también rehabilitar el punto médico, la sala de inmigración y pasaportes, y algunas oficinas de instituciones estatales.
El director del cruce de Joussieh, Dabah Meshal declaró a la prensa que el centro se reabrirá en las próximas horas de forma emergente y parcial para facilitar el regreso de los desplazados libaneses a su país.
El secretario general de la gobernación de Tartous, Hassan Hassan, dijo a la emisora Sham FM que este jueves comenzará los trabajos de rehabilitación del puente fronterizo de Al-Arida, para que vuelva a estar en servicio lo antes posible.
El Ministerio de Defensa de Siria había anunciado hoy la muerte de seis personas y enormes daños materiales en los masivos ataques israelíes en zonas fronterizas con el Líbano.
El gobernador de Tartous, Firas Al-Hamid, dijo que la agresión contra el cruce fronterizo de Arida causó lesiones a 24 personas, tres de ellos son paramédico, y dos se encuentran en estado grave.
A su vez, el Ministerio de Transporte denunció que la agresión provocó la destrucción completa del puente vital de Arida que asegura el movimiento del transporte entre los dos lados del río Kabir Shamali y enlaza entre Tartous y la frontera libanesa.
Los daños en el puente son muy graves y severos, y los pilares y las losas quedaron destruidas, además del colapso total del puente antiguo paralelo al mismo, afirmó el director Transporte provincial Hussein Nasser.
El sábado último, las autoridades sirias denunciaron que bombardeos sionistas ocasionaron grandes daños materiales en las instalaciones del cruce fronterizo de Joussieh entre Siria y Líbano, ubicado cerca del municipio de Qussair.
Tel Aviv intensificó sus acciones militares contra blancos en el territorio sirio, al sumar más de 150 ataques en casi 13 meses y que ocasionaron al menos 200 muertos y grandes daños materiales.
El más mortífero ataque fue el día 17 de este mes, cuando al menos 90 personas perdieron la vida por ataques aéreos israelíes contra la ciudad de Palmira en el desierto sirio, ubicada a unos 300 kilómetros al nordeste de Damasco.
El Gobierno sirio instó mediante repetidos comunicados a unir esfuerzos para detener los crímenes de guerra y el genocidio cometido por Israel contra los estados y pueblos de la región.