¡Mantente alerta!|Estas señales pueden indicar a una mujer que está deshidratada

No beber la cantidad de agua recomendada al día trae consecuencias para el organismo que pueden poner en riesgo la salud. Cansancio, dolores de cabeza y calambres pueden ser señales de que estás deshidratada.

1. Te duele la cabeza

Aunque estemos sentadas en la oficina todo el día nuestro cuerpo pierde líquido además de sales minerales. Si no se reponen constantemente, el volumen de sangre cae, lo que genera una baja en la cantidad de oxígeno que llega hasta nuestro cerebro. Eso hace que los vasos sanguíneos se dilaten y te duela la cabeza.

2. Te sientes cansada

Otro efecto de la baja de oxígeno en la sangre es que nuestros nervios y músculos empiezan a apagarse para cuidar sus reservas haciendo que nos sintamos fatigadas

3. Tu orina es oscura

Cuando tomamos una buena cantidad de agua, ésta limpia los residuos que tenemos dentro del cuerpo y los expulsa por medio de la orina. Sin agua, estos restos se concentran en el cuerpo y la orina es más turbia por la gran cantidad de sustancias que está expulsando poco a poco.

4. Estás estreñida

Al igual que con la orina, el agua hace que los residuos sólidos se muevan con más facilidad por el tracto intestinal y ayuda a que vayas al baño más seguido. Cuando estamos deshidratadas, el colón absorbe demasiada agua de los alimentos dejando las heces duras y secas, lo que aumenta el problema de estreñimiento.

5. Tu piel pierde la elasticidad

El agua no solo ayuda a mantener la piel hidratada y saludable sino que le brinda elasticidad. Si dejamos de tomar agua, nuestra piel irá perdiendo la capacidad de estirarse además de verse deslucida y reseca.

6. Sientes la boca seca

Esta es una de las señales más obvias de que tu cuerpo pide agua a gritos. Los labios se resecan, la lengua está pastosa y cambia la sensación en tu boca. No es necesario que te llenes la barriga de agua, basta con que tomes unos sorbos cada cierto tiempo para mantenerte hidratada.

7. Te dan calambres constantemente

La pérdida de líquidos hace que la cantidad de sodio y potasio en nuestro cuerpo disminuya. Esos componentes son importantes para la contracción muscular y, al haber un desbalance de ellos, los músculos se contraen de forma involuntaria y extraña generando los calambres.

8. Tu cuerpo está demasiado caliente

Este punto es más notorio cuando nos ejercitamos. Si no tomamos agua durante el ejercicio, no sudaremos lo suficiente para que el cuerpo regule su temperatura y empezará a sobrecalentarse por lo que sentiremos nauseas, mareos o dolor de cabeza.

Fuente/emedemujer.com