Desde diciembre de 2014 hasta marzo de este año, han muerto más de 15 mil personas por falta de calefacción en Reino Unido. En los últimos meses, ha aumentado en un 77% el número de fallecidos por el frío. La mitad de las personas que han perdido la vida son inmigrantes, aseguró para La Radio del Sur el coordinador de Proyecto de Educación para los inmigrantes y sectores vulnerables, Carlos Cruz.
“Los mayores de 60 años se echan la bendición cuando está llegando el invierno, porque hay que apretarse el cinturón con la calefacción, con el calor, que es carísimo, entre otras cosas, porque esto se ha privatizado de manera tremenda y hay muchas personas y muchos hogares que no tienen la posibilidad, ni recursos para pagar excesivos costos de los servicios públicos”, explicó.
En entrevista concedida al programa Mientras Tanto y Por si Acaso, Cruz informó que pese a lo escandalosa que es la noticia, no es nueva. “Viene sucediendo desde hace varios años, especialmente durante el tiempo que ha estado la coalición conservadora y liberal demócrata en el poder”.
Además “la mayoría, por lo menos el 50% de las personas que mueren son personas extranjeras”, esto porque los inmigrantes tienen menos posibilidades de recibir la ayuda gubernamental. En este contexto, el coordinador del Proyecto de Educación para los inmigrantes en Reino Unido destacó la importancia de la vulnerabilidad de los inmigrantes “en la generación de pobreza que está causando las políticas retardatarias de David Cameron (Primer Ministro)”.
Al llegar a Reino Unido, los inmigrantes se ven obligados a aprender el inglés para tratar de tener una opción, sin embargo, la posibilidad se le ha visto bloqueada porque “las ayudas estatales han sido recortadas casi en 70 u 80%” y además las escuelas les han cerrado el acceso, señaló el entrevistado.
A juicio de Carlos Cruz, el tema de la calefacción es una pequeña parte de todo el entramado que trae el paquete de austeridad presentado desde 2010, por la coalición de gobierno, ahora partido conservador y que tienen la mayoría en el Parlamento. Explicó que “las medidas son extremas” y las políticas de los servicios públicos se van a recortar en todos los aspectos: pensiones, empleo, entre otras.