Empleados de la empresa de logística FedEx encontraron un bulto sospechoso, enviado desde Estados Unidos a Túnez, en el aeropuerto de Charles de Gaulle de París el pasado jueves, informa AFP.
El envío contenía una cazuela llena de tuercas y pernos, similar a un artefacto explosivo.
La investigación encontró que la falsa bomba había sido enviada por el ministerio de Defensa de EEUU y no representaba ningún peligro. La misma iba a ser utilizada durante ejercicios militares antiterroristas.