Los diputados derechistas que violentaron la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) y arremetieron verbalmente contra las rectoras, amenazan con radicalizar su parlaguarimba.
Amparados en la inmunidad pretenden que el Poder Electoral se someta a sus exigencias, imposición de lapsos y arrebatos guarimberos.
La Directiva de la Asamblea Nacional (AN), para que sus miembros violentos puedan actuar por la libre, suspende las sesiones.
El pasado miércoles llevaron cadenas al CNE.
Ojalá la próxima vez no lleven guayas.