Una delegación de la Unión Africana (UA) llegó a Benhgazi, este de Libia y bastión de los rebeldes de ese país, con una hoja de ruta aceptada para buscar una solución política a la crisis que vive la nación norteafricana, mientras que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) intensifica sus bombardeos contra tropas del gobierno.
La UA que intenta mediar en el conflicto libio llegó al mediodía a Benhgazi, a unos mil kilómetros al este de Trípoli (capital), un día después de su reunión con el líder libio Muammar Gaddafi.
Según medios informativos locales, los mandatarios de Suráfrica, Mauritania, Mali, República del Congo y Uganda se interesaron en poner en práctica «reformas políticas necesarias para eliminar las causas de la presente crisis» y aplacar la rebelión iniciada el 15 de febrero pasado.
La misión de la UA subrayó su llamado a un «cese inmediato de todas las hostilidades» y propuso, a tono con una demanda de la Unión Europea (UE), una hoja de ruta que se adoptó en marzo último instando a una «conducción diligente de la ayuda humanitaria».
Asimismo, pide que se tomen en cuenta “las legítimas aspiraciones del pueblo libio para la democracia, reforma política, justicia, paz y seguridad” en la nación norteafricana.
Este domingo, los mediadores africanos que buscan un cese al ataque imperialista de la OTAN y sus aliados contra territorio libio, se entrevistaron durante varias horas con el líder de Libia Muammar Al Gaddafi, quien “aceptó la hoja de ruta que le hemos presentado”.
«La solución propuesta será detallada en un comunicado», señaló el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, sin precisar cuándo se hará público.
«En ese comunicado se hará un llamamiento a la OTAN para que cese sus bombardeos (en Libia) con el fin de dar una oportunidad a un alto el fuego», añadió Zuma.
La hoja de ruta prevé en particular «el cese inmediato de las hostilidades, el envío de ayuda humanitaria a la población y el lanzamiento de un diálogo entre las partes libias en vistas a un período de transición”, dijo por su parte el comisario para la paz y la seguridad de la UA, Ramtan Lamamra.
Pese a los fines de la UA de pacificar la crisis en Libia, los aviones de la OTAN mantuvieron este lunes los bombardeos y el asedio a posiciones gubernamentales en Misrata (noroeste) y Ajdabiya (este).
Los combates en la ciudad de Ajdabiya y sus alrededores causaron la muerte de 12 personas durante este fin de semana, mientras que en Misrata los ataques dejaron 11 muertos.
La OTAN anunció este domingo en Bruselas, capital de Belgica, que había destruido 26 blindados de Gaddafi, 12 cerca de Ajdabiya y 14 en Misrata.