Las perseidas o lágrimas de San Lorenzo se apoderarán del cielo nocturno en el mes de agosto, permitiendo a los espectadores observar entre 60 y 70 meteoros por hora, indicó el experto en meteoros de la Administración Nacional de la Aeronáutica (NASA), Bill Cooke.
El espectáculo cósmico será más visible entre el 11 y el 13 de agosto, apreciándose mejor en el hemisferio norte.
Los expertos explican que el fenómeno se da cuando la Tierra atraviesa el rastro del cometa Swift-Tuttle, descubierto en 1962, considerado el mayor objeto cósmico en pasar repetidamente por la Tierra.
El rastro del cometa forma polvo y fragmentos que causan la lluvia de meteoros de pico amplio, que la Tierra atraviesa en tres semanas.
Lo que podemos ver en la Tierra son partículas del cometa que, al penetrar en la atmósfera del planeta, se calientan y entran en combustión, generando un rastro luminoso en el cielo.