La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, viajó este domingo a Washington (capital de los Estados Unidos) donde sostendrá este lunes con su homólogo norteamericano Barack Obama una agenda enfocada en la cooperación en educación, que es una de las principales necesidades de Brasil y también el comercio.
Esta es la primera visita oficial de Rousseff a Estados Unidos y su actividad comenzará este mismo domingo, cuando nada más llegar se reunirá con un grupo de empresarios brasileños que, a su vez, mantendrán diversos contactos con representantes del sector privado estadounidense.
Este lunes, Rousseff será recibida por Obama en la Casa Blanca para una reunión en la que revisarán la relación bilateral, con particular interés en el intercambio comercial, que en 2011 sumó 74 mil millones de dólares pero que ambos gobiernos desean ampliar, sobre todo ahora que Estados Unidos empieza a dar señales de recuperación.
Posterior a esta reunión Rousseff confirmó su participación en las clausuras del encuentro de altos ejecutivos y el seminario Brasil-Estados Unidos: Alianza para el siglo XXI.
Otro tema de importancia que será tocado en esta visita de dos días a Estados Unidos, Rousseff y Obama será el de la reforma del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuyos miembros permanentes son Estados Unidos, Francia, Reino Unido, China y Rusia, que son los únicos que tienen poder de veto, así como la agenda de la VI Cumbre de las Américas, a la que ambos asistirán el próximo fin de semana, en Cartagena de Indias (Colombia).
Voceros oficiales del gobierno brasileño informaron que la presidenta Rousseff expondrá ante Obama su «convicción», compartida con la mayoría de los países latinoamericanos, de que esa deberá ser «la última» cumbre americana «sin Cuba», país al que Estados Unidos mantiene un bloqueo desde hace cinco décadas.
Otro punto que Rousseff discutirá con Obama es la «sociedad» que ambos países han comenzado a tejer en términos de educación.
Rousseff busca abrir las puertas de las mejores universidades estadounidenses a más brasileños, y este martes visitará la Universidad de Harvard y el Massachusetts Institute of Technology (MIT) en Boston, para impulsar su programa «Ciencia sin fronteras», que apuesta a formar a más de 100 mil estudiantes brasileños en el exterior en los próximos cuatro años.