Rusia denunció que Estados Unidos (EE.UU) es el principal país importador mundial de «mercancía humana», con entre 100.000 y 500.000 víctimas del tráfico humano para la explotación laboral, de entre los 12 millones de inmigrantes indocumentados.
El vocero oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso, Alexander Lukashevich, precisó que, de acuerdo con organizaciones de defensa de los derechos humanos, Estados Unidos suministra esclavas sexuales a las regiones de despliegue permanente de las fuerzas armadas estadounidenses.
También mencionó el comercio de niños en Estados Unidos. Según la organización no gubernamental Proyecto Polaris, unos 100.000 menores se vinculan a la industria del sexo en ese país cada año.
Lukashevich respondió de esta manera al informe anual estadounidense sobre el tráfico de personas, que incluyó a Rusia, entre otros 186 países, en la lista, reseñó Prensa Latina.
Rusia rechazó las acusaciones estadounidenses sobre la supuesta existencia de casos de trabajo forzado durante la construcción de las instalaciones para los Juegos Olímpicos de invierno de Sochi 2014.
Precisó que las condiciones creadas para los trabajadores se encuentran bajo un fuerte control de las estructuras de salvaguarda y de la sociedad.
El vocero de la Cancillería rusa manifestó que el informe estadounidense no incluye datos de violaciones a los derechos humanos en Estados Unidos, por lo que lo calificó como politizado.