El presidente de México calificó de inaceptable la compra-venta de voluntades políticas en las últimas elecciones, con lo que se suma a denuncias de Andrés Manuel López Obrador, quien el jueves presentará pruebas de cinco millones de votos así obtenidos por el ganador del PRI, Enrique Peña Nieto.
Calderón, dijo que la compra de votos es un tema serio que afecta la calidad de la democracia mexicana, más allá de que sea suficiente o no para desacreditar el triunfo del candidato presidencial del centrista Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Peña Nieto se impuso en los comicios con el 38,21 por ciento de los votos con más de seis puntos de ventaja sobre el candidato de centroizquierda AMLO, como se lo conoce a López Obrador por sus siglas.
«La esencia de la democracia no es sólo contar los votos, sino que las campañas se desarrollen en condiciones iguales», dijo Calderón, del derechista Partido Acción Nacional (PAN), que quedó tercero en los comicios, citado por la agencia noticiosa DPA.
«Esta compra-venta de voluntades políticas, así sea una o diez o cien o mil, es simplemente inaceptable», afirmó el mandatario, y dijo hacer votos porque la autoridad electoral la rectifique de inmediato y la castigue si debe castigarla.
El mandatario mexicano se refirió en particular a las denuncias de compra de votos por parte del PRI a través de monederos electrónicos o tarjetas de víveres de una cadena de supermercados.
«Es un tema que no digo que vaya a ser suficiente, no lo sé, para descalificar una elección con esas diferencias (de votos), pero sí que debe ser resuelto», consideró.
Por su parte, AMLO, en conferencia de prensa, aseguró que la denuncia de compra de votos la hará recién el próximo jueves, y que no lo hará antes porque todavía se encuentra reuniendo muchas más pruebas sobre la presunta compra de votos por parte del PRI para presentarlas a la autoridad electoral.
Además el candidato centroizquierdista explicó que actuará con cautela, por lo que esperará hasta ese día para fijar una postura definitiva sobre las elecciones que, según el conteo, perdió ante el candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, por una diferencia que ronda algo más de seis puntos.
López Obrador también afirmó que tiene en su poder algunas boletas que se utilizaron para el relleno de urnas a favor del candidato del PRI y Partido Verde.
Por su parte, el coordinador de la campaña de López Obrador, Ricardo Monreal, dio a conocer un listado de cuentas de funcionarios públicos de gobiernos del PRI que también participaron en la compra de votos manejando, ilegalmente, recursos públicos.