Con más de 70 manifestaciones en toda España, los trabajadores de ese país rechazarán el próximo 19 de julio el nuevo paquete de recortes aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy para ahorrar 65 mil millones de euros a costa de la subida del IVA a partir del 1 de septiembre, la reducción de las prestaciones por desempleo y la eliminación de la paga de Navidad este año para los empleados públicos.
Los principales sindicatos españoles, la Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CCOO), calificaron como un «fraude democrático» el nuevo paquete de medidas de ajuste, pues creen que empobrecerá aún más a la población.
Los líderes de ambas centrales sindicales, Ignacio Fernández Toxo (CCOO) y Cándido Méndez (UGT) aseguraron en una conferencia de prensa que los recortes son un «golpe a los servicios públicos» y una «hoja de ruta para empobrecer a la población».
«Aquí prácticamente no se salva ni Dios, sólo las grandes empresas», señaló Méndez, a lo que Toxo ha añadió que «no hay ninguna medida para favorecer el empleo, ni de los parados ni de los jóvenes», lamentaron.
La prensa española destacó que los sindicatos no descartan una huelga general y advirtieron su intención de elaborar un calendario de protestas «que abarque hasta final de año».
Los dirigentes sindicales denunciaron que los ajustes aprobados son «clasistas», que van contra los desempleados, los empleados públicos, los autónomos y profesionales, las pymes (pequeñas y medianas empresas). Advirtieron que causará un incremento «muy serio» del desempleo, porque supone un «golpe brutal» a las capas medias y aventura un «nuevo asalto a las pensiones».
Los dirigentes sindicales insisten en que Rajoy debe convocar un referendo para someter a consulta social sus políticas de ajuste y han criticado que se haya mezclado al Rey en el asunto de los ajustes. «Se ha utilizado al Rey y él se ha dejado utilizar», denunciaron, según la prensa española.