El colombiano Luis Felipe Ríos, condenado a 16 años de prisión en Nicaragua por actos de espionaje, alertó sobre la posibilidad de una agresión militar en contra de este país centroamericano, según un vídeo difundido este miércoles por el Ejército.
El espía reveló que el interés de la Inteligencia Militar de Colombia era aunar detalles del sistema de defensa, la seguridad nacional, y la cooperación militar entre Nicaragua y países como Venezuela, Rusia, Cuba e Irán.
Además dijo que la información recopilada por él durante varios meses en este país mientras se hacía pasar por corresponsal de una revista española, era compartida con Estados Unidos y Costa Rica.
De acuerdo con Ríos, la Inteligencia colombiana le solicitó las coordenadas de las bases militares nicaragüenses, la ubicación de los depósitos de combustibles, el estado operativo de los tanques de guerra, los misiles de defensa de tipo SAM-7, y los planes de modernización militar de Nicaragua.
El agente debía averiguar si existían vínculos con la Inteligencia cubana y la mayor cantidad de información posible acerca de Venezuela, si contaba con activos militares aquí o brindaba asesorías a cualquier nivel.
Otros aspectos de su misión eran explorar la presencia de cooperación iraní y rusa, esta última como proveedora de repuestos y nuevos equipos militares.
Ríos enfatizó en el interés de su país de saber si Nicaragua cuenta con un respaldo real por parte de Venezuela, Rusia, Irán y Cuba, en caso de desatarse un conflicto armado.
Según el informante, Colombia invierte unos 500 millones de dólares en armamentos destinados a ataques con misiles cruceros, pues no piensa en desembarco de tropas sino en acercar sus aeronaves lo máximo posible a las bases nicaragüenses a fin de bombardearlas.
El armamento adquirido incluye submarinos alemanes, fragatas de guerra FC-1500 y misiles surcoreanos con capacidad de 150 kilómetros de alcance, entre otros, detalló.