El ex director de la Red Nacional Antidrogas y de Prevención de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA), Rafael Sánchez, rechazó el informe emitido por la Oficina contra las Drogas y el Delito de la Organización de Naciones Unidas (ONU), presentado el pasado miércoles el cual señala que más de la mitad de los cargamentos de cocaína con destino a Europa interceptados entre 2006 y 2008 provenían de Venezuela.
Sánchez calificó el documento de la ONU como maniqueo y contradictorio, e igualmente resaltó que es inexplicable cómo ese informe le adjudica a Venezuela tal porcentaje, mientras que a Colombia -que produce el 52% de la cocaína del mundo- solo le atribuye el 5% de la droga que consumen Estados Unidos y Europa.
La posición de Sánchez ante estas acusaciones fueron manifestadas durante una entrevista realizada este lunes en el programa Despertó Venezuela que se difunde por Venezolana de Televisión (VTV).
“Las drogas son un mecanismo de control y dominación de los pueblos. Se atacan con prevención, cultura, deporte, mano dura contra los traficantes y distribuidores y tratamiento para la población que consume”, aseveró Sánchez.
El pasado viernes el ministro del Poder Popular para las Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, solicitó a la ONU rectificar el informe, tras considerar que los datos expuestos en el documento no se corresponden con la realidad y tergiversan lo que ocurre en el país en materia de lucha contra las drogas.
GOBIERNO NACIONAL ATIENDE A CONSUMIDORES DE DROGA
Rafael Sánchez, presidente de la Fundación José Félix Ribas, organismo adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Salud, informó que desde ese ente se está impulsando la construcción de un sistema nacional de tratamiento para las personas inmersas en el consumo de drogas, como parte de la lucha contra el tráfico y consumo de sustancias ilícitas.
Asimismo explicó que el sistema para atender a los consumidores de droga está conformado por tres estructuras organizativas, que son:
- El Centro de Orientación Familiar, donde se hace el primer abordaje;
- El Centro Especializado de Prevención y Atención Integral (Cepai), que da el tratamiento de desintoxicación y diagnóstico.
- Las Comunidades Terapéuticas Socialistas, dirigidas a internar a quienes están inmersos en el consumo severo.
Sánchez también destacó que mientras un centro privado de desintoxicación cuesta 10 mil bolívares sólo para el ingreso, y más mil 200 bolívares diarios, sin incluir los medicamentos, el Gobierno Bolivariano ofrece atención gratuita y de calidad,”porque la salud es un derecho”.
En cuanto a la ingesta de licor, el Presidente de FundaRibas señaló que de acuerdo con estudios realizados por la ONA, 70% de la población venezolana es consumidora de alcohol. Al respecto puntualizó que “el alcohol abre las puertas a otras drogas. Hay que combatirlo en su justa medida, porque causa más problemas incluso que las drogas ilícitas”.