La Fragata Libertad, buque escuela de la Armada Argentina, inició este miércoles el viaje de regreso al país suramericano, luego de permanecer cerca de 80 días retenida en Ghana.
La embarcación estuvo retenida en el puerto de Temas desde principios del mes de octubre, por una medida impuesta por la justicia de ese país africano que hizo lugar a un reclamo impulsado por el fondo buitre NML Capital Limited de Estados Unidos, reseñó Telesur.
Ante esta acción y la negativa de las autoridades de Ghana de liberar la fragata, Argentina denunció al país africano ante el Tribunal Internacional del Derecho del Mar, con sede en Hamburgo, Alemania.
El Tribunal dictaminó la liberación de la Fragata Libertad fijando como plazo máximo el 22 de diciembre para que deje el puerto ghanés.
La embarcación partió habiendo realizado los aprestos del reabastecimiento de combustible y la provisión de agua y víveres. Los 8 mil kilómetros que cubrirán la distancia desde el puerto de Tema demandarán alrededor de 20 días.
Se estima que la nave llegue al puerto de Mar del Plata, Argentina, el 9 de enero.
Esta semana, la mandataria argentina, Cristina Fernández, informó que la fragata será recibida en el país con todos los honores y se habilitará para que sea visitada por argentinos y turistas, porque ahora “es el símbolo de la soberanía y la dignidad nacional”.
El buque zarpó de Buenos Aires el pasado 2 de junio con más de 300 marinos a bordo para hacer su viaje anual de instrucción y recaló en puertos de Brasil, Surinam, Guyana, Venezuela, Portugal, España, Marruecos y Senegal antes de llegar a Ghana.
El barco fue retenido en el puerto ghanés de Tema, por una solicitud que hizo la compañía NML Capital Limited, que reclama deudas pendientes de las autoridades argentinas, luego que invirtiera en títulos de deuda pública durante la crisis de 2001 en el país suramericano.
La firma NML cabe en la categoría de los «fondos buitre», porque acostumbra a invertir en la deuda pública de empresas o Estados soberanos cuando se enteran de que están cercanos a la quiebra; por ello, la comparación con el ave carroñera.