1.400 casos|Japón registra cifra récord de denuncias de acoso

La policía capitalina atendió una cifra récord de casos de acoso durante 2012 con más de mil 400 personas que acudieron a ese servicio en previsión de asesinato o crímenes graves, informó este lunes la gendarmería.

El reporte de la corporación da cuenta que ese número significó 45 por ciento más de episodios que durante 2011. La corporación refirió que fueron mujeres 86 por ciento del total de denunciantes, 62 sufrió acoso de sus parejas o exparejas, mientras 10 de cada 100 fue víctima de personas conocidas y ocho, de extraños.

De acuerdo con el cuerpo de agentes, se ha disparado la cifra de denuncias ante el temor de ser víctima de un asesino o un secuestrador, tras un incremento significativo de tales hechos delictivos.

Otros episodios de similares características ocurren en las escuelas japonesas, por lo que el Gobierno central anunció una ayuda de millones de dólares a las direcciones para prevenir y detectar los casos.

En esa partida se prevé una cantidad sustancial para que los asesores en las enseñanzas primaria y secundaria permanezcan mayor cantidad de tiempo en los centros docentes y eviten o descubran episodios de abuso.

Una investigación del Ministerio japonés de Educación reveló que en los centros docentes se registraron casi 145 mil casos de acoso durante el primer semestre de 2012, el doble del total de 2011.

De acuerdo con la pesquisa, hubo 300 episodios de especial gravedad, en tanto las víctimas sufrieron agresiones físicas o se les exigió dinero.

Uno de los afectados intentó suicidio por las condiciones mentales en que quedó, tras ser blanco de insultos, improperios y otros desmanes de sus compañeros de estudio, mientras otro perdió capacidad auditiva por estrés.

Como resultado de los informes, a los centros docentes de enseñanza primaria y secundaria se les ha ordenado reforzar la vigilancia.

En 2006, el Gobierno japonés rectificó la definición de acoso al ampliar su alcance a toda situación en que una persona se sienta hostigada.

Fuente/PL
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