El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuador sostuvo una serie de encuentros con representantes de nueve organizaciones, provenientes de diferentes países, que participarán en calidad de observadores en las elecciones generales a desarrollarse este domingo 17 de febrero, con el objetivo de garantizar la transparencia del proceso comicial.
El presidente del máximo ente electoral, Domingo Paredes, explicó que solicitó este martes la presencia de los grupos nacionales e internacionales que serán observadores electorales, para trabajar en las funciones que desempeñarán durante la jornada de votación.
En total, han sido acreditados unos 380 representantes de nueve agrupaciones extranjeras, entre ellas la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la Liga Árabe, la Organización de Estados Americanos (OEA) entre otras.
Al encuentro asistió el candidato a la reelección por el Movimiento Alianza PAIS, Rafael Correa, quien expresó su confianza en la labor de los acompañantes para garantizar la legitimidad de este proceso.
Correa se reunió con la colombiana María Emma Mejía, delegada especial de la Unasur, y con el uruguayo Wilfredo Penco, coordinador de la misión de observadores del organismo regional.
Esta será la segunda oportunidad en que una misión de la Unasur realice un trabajo de observación, tras los comicios venezolanos del pasado 7 de octubre de 2012.
El organismo tiene previsto presentar tres informes: uno durante el periodo de veda electoral (del viernes 14 al domingo 17 de febrero); otro el mismo día de las elecciones, y el último en una fecha posterior y ante los cancilleres del ente regional.
La misión de la Unasur fue la primera en instalarse en Ecuador, el pasado 10 de enero, y permanecerá en el país hasta el 22 de febrero.
Correa expresó que para él y su movimiento político “es una gran alegría, satisfacción y seguridad que haya un equipo observador de la Unasur”, aunque lamentó que haya sido motivo de suspicacias la no invitación a la misión electoral de la Unión Europea.
“Acaso nuestra América no tiene capacidad para garantizar transparencia en nuestros propios procesos electorales. Creo que son pasos importantes, simbólicos para la construcción de la Patria grande que ahora tengamos como observadores a la Unasur, a la OEA y no a regiones fuera de América Latina, como si fuéramos una colonia que debe ser supervisada”, enfatizó.
Luego, Correa se reunió con cerca de trescientos observadores internacionales de nueve organizaciones de cinco continentes, a quienes alertó sobre la campaña de deslegitimación de los resultados electorales y destacó la institucionalidad de observación a nivel regional.