El crecimiento económico y mejora de la calidad de vida de los bolivianos en los últimos siete años, a partir de la nacionalización de los recursos naturales, fueron expuestos este viernes por el presidente Evo Morales en la III Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno del Foro de Cooperación América del Sur y África (ASA), que se lleva a cabo en Malabo, capital de Guinea Ecuatorial.
Durante su alocución, Morales explicó que antes de su llegada al poder en 2006, “hubo cinco presidentes en cinco años, no se garantizaba la democracia en Bolivia, cambios permanentes, protestas sociales, y la Embajada de Estados Unidos impulsando golpes de Estados, una conspiración permanente”.
Agregó que cuando tomó el poder, la Agencia Central de Inteligencia (CIA, pos sus sigla en inglés) “estaba en el Palacio de Gobierno, el Fondo Monetario Internacional (FMI) estaba en el Banco Central de Bolivia y el grupo militar de Estados Unidos estaba en el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas”.
Eso fue revertido durante su administración, que tomó las riendas de las instituciones.
A Bolivia le ha ido mejor “después de alejarnos de esas instancias de control político, militar y económico”, dijo.
Recordó que los hidrocarburos estaban en manos de las transnacionales, con contratos anticonstitucionales, que entregaban 82% de las ganancias a las empresas extranjeras y sólo 18% se quedaba en Bolivia.
Indicó que una de las primeras medidas al llegar al Gobierno, fue la nacionalización de los hidrocarburos. Con lo que se revirtió el reparto de las utilidades.
Ahora “82% queda para los bolivianos y 18% para las empresas que invierten en Bolivia”.
Explicó que “la renta petrolera en 2005 era de 300 millones de dólares, el año pasado (2012) llegamos a más de 4.200 millones de dólares”.
Estas ganancias son destinadas a la inversión social. Lo que ha repercutido en los últimos siete años en que un millón de bolivianos pasara de la pobreza moderada a clase media y más de un millón 300 mil saliera de la pobreza extrema.
“Esos resultados nos alientan bastante para seguir trabajando”, agregó y enfatizó: “En Bolivia, especialmente, la política no es negocio ni beneficio, la política es servicio, compromiso, sacrificio por nuestros pueblos”.