El Tribunal de Apelaciones de Nueva Zelanda decidió que Kim Dotcom, el fundador del sitio Megaupload, tiene derecho a demandar a la agencia de espionaje de este país.
Esa instancia desestimó la petición de la fiscalía que pedía excluir a la Oficina gubernamental de Seguridad de las Comunicaciones (OFC) de un recurso promovido por la defensa del polémico ejecutivo, de nacionalidad alemana y con residencia permanente en Nueva Zelanda.
Los defensores de Dotcom alegaron que toda la operación policíaca contra su defendido y realizada a inicios del 2012, fue ilegal e incluso la OFC lo había espiado con anterioridad.
En ese sentido, el Gobierno neozelandés se disculpó por esos hechos, poco después que un tribunal de Auckland, la mayor ciudad de la nación, le concediera libertad bajo fianza y pospusiera un juicio en su contra hasta agosto del 2013.
Sobre Dotcom pesa una demanda de extradición a Estados Unidos, país que lo acusa de piratería informática y violación de derecho de autor por más de 500 millones de dólares.
En la actualidad, el ejecutivo creó una nueva página de archivos en Internet llamada Mega, la cual está inscripta legalmente ante la Justicia neozelandesa.