La conclusión de dos meses de maniobras militares de Estados Unidos y Surcorea, con poderosos armamentos y numerosas tropas en las cercanías de Norcorea, pudieran poner fin a un período de graves tensiones en la península, según comentan este miércoles especialistas.
Reportes de prensa citan al exministro surcoreano de Unificacion Lee Jae-Joung, quien dijo este miércoles en Seúl que los ejercicios celebrados en esta ocasión fueron mucho más agresivos, lo que hizo que la reacción de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) fuera mayor.
Desde el comienzo a principios de marzo de las denominadas Foal Eagle, con participación de 10 mil soldados estadounidenses y 200 mil surcoreanos, la RPDC insistió en reiteradas ocasiones en que esos movimientos militares eran irresponsables y peligrosos.
La utilización de poderosas armas, como los superbombarderos con misiles nucleares y los sofisticados B-2 Spirits, provocaron las denuncias de Pyongyang, que tomó una serie de contramedidas para repudiar ejercicios que consideró estaban destinados a ensayar un posible golpe nuclear en contra de ese país.
Las tensiones en la península coreana, que habían subido gradualmente de tono desde que la RPDC lanzó en diciembre último un satélite con un cohete portador propio y la realización el 12 de febrero de su tercera prueba nuclear, llegaron al punto de mayor peligro con estas maniobras militares conjunta entre Estados Unidos y Surcorea.
El gobierno de Pyongyang responsabiliza a las autoridades en Washington de la situación actual en esta región del mundo, tanto por los ensayos militares conjuntos con Surcorea como por ser el promotor de resoluciones de condena a la RPDC adoptadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Las acciones de Estados Unidos y Surcorea contra la RPDC son consideradas parte de una estrategia para aislar y arrinconar a este país, que ante esas presiones decidió anular la tregua pactada por las dos partes rivales en la Guerra de Corea (1950-53).
También, Norcorea retiró su representación del Paralelo 38, cortó las líneas de comunicación que existían entre las fuerzas militares de las dos partes de la península y anunció que el país entraba en fase de guerra con Surcorea.
Más recientemente, las autoridades norcoreanas decidieron retirar sus 53 mil trabajadores del complejo industrial de Kaesong, que es el único proyecto conjunto de Surcorea y Norcorea, y donde están establecidas 123 empresas y fábricas surcoreanas.
El diario norcoreano Rodong Sinmun insistió en un comentario que Estados Unidos es el responsable de la crisis actual por practicar una obstinada política de hostilidad que pretende aplastar a la RPDC «con la ambición de dominar el mundo».
Al referirse a la preocupación internacional ante la gravedad de la situación en la península coreana, el diario Rodong Sinmun expresa que para aclarar la verdad de esa crisis nuclear hay que conocer la esencia del problema, que recuerda se inició cuando Estados Unidos ocupó la parte sureña de Corea.
Este período de crisis y tensiones a las puertas de poderosos países como China y Rusia ha ocasionado numerosos llamados a la calma, la contención y el regreso a las negociaciones.
Al respecto, las autoridades chinas han insistido en la necesidad de retornar a las negociaciones a seis bandas (China, Estados Unidos, Rusia, Japón, Surcorea y la RPDC) sobre la desnuclearización de la península y para hallar una solución negociada a los antagonismos y enfrentamientos entre las dos partes.