La cancillería rusa insistió este martes en la necesidad de establecer alerta máxima ante el hallazgo por las autoridades iraquíes de laboratorios clandestinos de Al Qaeda con armas químicas, que pretendían emplear en ese país y en Siria.
En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores asegura que las informaciones de Bagdad confirman la necesidad de extremar las medidas preventivas frente a los intentos de provocación con ese tipo de arsenales, que pueden afectar a la población civil.
Recuerda la nota que en fecha reciente algunos grupos extremistas sirios juraron fidelidad a Al Qaeda y llegaron a crear conjuntamente el movimiento autodenominado «Estado islámico en Iraq y Siria».
La diplomacia rusa ratifica el respaldo de Moscú a las autoridades de Bagdad en la batalla contra los terroristas de Al Qaeda y la proliferación de arsenales químicos. Coincidió la publicación de este documento con declaraciones del ministro francés de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, quien dijo tener certeza de que el gas sarín se empleó en Siria en varias ocasiones de forma localizada.
Fabius no aclaró dónde fue usada esa sustancia prohibida por la Convención de Armas Químicas ni quiénes la aplicaron, pero reiteró que un laboratorio parisino comprobó su presencia.
Recientemente el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, denunció que fuerzas opositoras y sus patrocinadores externos hacen todo lo posible para impedir la realización de la conferencia internacional sobre Siria convocada por Moscú y provocar una invasión contra ese país árabe.