«De hecho, Libia ya no existe como país. La situación actual es que algunas personas que disponen de la cantidad suficiente de armas luchan por la exportación del petróleo y el control de territorios», comentó Satanovski, presidente del Instituto de Oriente Próximo.
Estos grupos, de los que existen varios centenares, comprenden uniones tribales, milicias y formaciones islamistas de varios tipos, incluidos partidarios de Al Qaeda, sostiene el experto.
«Es un mosaico más complejo que las tres unidades tradicionales, Tripolitania, Fezán y Cirenaica», comentó.
Satanovski cree que son las tribus occidentales las que pueden unificar el país bajo el mando de una persona fuerte semejante al exlíder Muammar Gaddafi, derrocado y asesinado en 2011.
«De momento no hay tales líderes», resaltó.
La situación volvió a agravarse en Libia el lunes pasado cuando el Gobierno anunció planes de enviar tropas adicionales a Bengasi, la segunda ciudad del país, donde los extremistas locales llevan varios meses atacando a los agentes de seguridad.