Pese a las distintas acuzaciones|Uribe niega haber ordenado chuzadas contra opositores en Colombia

El ex presidente de Colombia, Álvaro Uribe, negó haber ordenado las escuchas ilegales, conocidas como chuzadas, y actos de espionaje por parte del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) realizado a personas opositoras a su Gobierno, periodistas y magistrados.

En un comunicado emitido desde México, dirigida por sus abogados, Uribe calificó como «infamias» las acusaciones que existen en su contra y dice haber sido «víctima» de varias interceptaciones las cuales no han sido investigadas.

La Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes del Congreso colombiano iniciará una investigación para conocer la responsabilidad del ex mandatario en estos delitos.

El pasado 16 de octubre, la alta ex funcionaria del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), Martha Inés Leal, involucró directamente a Uribe en el caso de los espionaje o escuchas ilegales.

Durante su comparecencia ante la Fiscalía colombiana Leal, quien se desempeñó como subdirectora de Operaciones del DAS, sostuvo que el entonces director del organismo estatal, Andrés Peñate, le ordenó seguir a distintas personalidades de la oposición por solicitud expresa del mismo presidente Uribe.

Este sábado salió a la luz pública algunos testimonios de Leal ante la justicia en los que indicaba que Peñate pidió seguir a la senadora liberal, Piedad Córdoba, quien actualmente se encuentra inhabilitada.

El espionaje a Córdoba fue realizado por «instrucciones del doctor Peñate, quien a su vez le habría dicho que era por orden del entonces Presidente de la República, Álvaro Uribe», sentenció.

Agregó que el ex gobernante «en varias ocasiones me requirió por los resultados que hasta la fecha que él se retiró del DAS no se habían logrado conseguir».

El abogado del ex jefe de Estado, Jaime Granados, señaló el pasado 16 de octubre durante unas declaraciones para una emisora local que la ex funcionaria del DAS no tiene pruebas de que Uribe haya ordenado interceptar las comunicaciones de los opositores a su Gobierno.

«A esta señora Leal no le consta nada porque jamás se ha reunido con el ex presidente Uribe. Ella dijo que Peñate había dicho, según ella, que eso era por interés de Casa de Nariño y mencionó al ex presidente Uribe», indicó Granados.

El jurista se refirió a la petición del ex presidente de hacer pública la investigación en la Comisión de Acusaciones y dijo que se hace para que la opinión pública conozca la verdad sobre el escándalo en el DAS.

La senadora Córdoba, quien se ha presentado en varias oportunidades como mediadora ante las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para la liberación de secuestrados, indicó que «mucha gente ya sabe hace mucho rato» que Uribe estuvo detrás de la orden de las chuzadas.

«Uno no puede ser parte de la Policía secreta del Estado y que el jefe del Estado no conozca absolutamente nada, es absolutamente claro que él sí sabe de eso», señaló la congresista a un medio local.

De igual forma indicó que el actual jefe del Estado colombiano, Juan Manuel Santos, y en ese entonces ministro de Defensa, también «sabía absolutamente todo».

La ex subdirectora de la central de inteligencia señaló que se le había ordenado averiguar quiénes eran las fuentes del periodista Daniel Coronel, director del informativo Noticias Uno y quien ha revelado varios escándalos de corrupción de funcionarios de la Administración de Uribe.

«El doctor Peñate fue quien ordenó hacer todas las labores de búsqueda de información y labores de campo del periodista Daniel Coronel a fin de determinar, primero si estaba en el país y segundo quiénes eran sus fuentes de información, pues según lo indicado por el presidente Álvaro Uribe estaba muy molesto por los artículos que éste venía publicando en la revista Semana», señaló Leal.

Leal también vinculó en el caso a quien fuera ministro del Interior, Fabio Valencia, durante el segundo mandato de Uribe.

Fuente/teleSUR

SI ES QUE URIBE NO ORDENÓ » CHUZAR » A NADIE, ENTONCES LO QUE DEMUESTRA ES QUE ÉL NO MANDABA EN ESE GOBIERNO; SÓLO ERA UN TÍTERE TANTO DE LOS GRINGOS COMO DE LA ULTRA-DERECHA COLOMBIANA.