Tras un año de haber asumido la operación de la empresa|Control obrero aumentó en 80% producción anual de Grafitos del Orinoco

El nuevo sindicato sí atiende a sus afiliados

A un año de la recuperación de la empresa Grafitos del Orinoco – cuyo cierre técnico fue decretado ilegalmente por sus antiguos propietarios- el grupo de 37 mujeres y hombres que asumieron el control de las operaciones lograron elevar en 80% la producción de antracita y grafito líquido, dos materiales necesarios para la industrias del hierro y el acero, ubicadas en Guayana.

Henry Escalona, secretario general del sindicato de Grafitos Orinoco, precisó que la industria trabaja a 80% de su capacidad, y que el logro obtenido es resultado de la aplicación de un modelo de gestión basado en “consejos de fábricas».

“Estamos celebrando esta victoria que nos permite restablecer los insumos que necesitan las empresas hermanas”, expresó.

La factoría -ubicada en Ciudad Guayana, estado Bolívar-, mantiene operativas tres líneas de producción y comercializa el total del mineral con las empresas estatales Siderúrgica del Orinoco Alfredo Maneiro, Orinoco Iron y CVG-Venalum, un hecho que Escalona cataloga como “la demostración de que el control obrero puede recuperar las sendas del crecimiento de las fábricas”.

En abril de 2010 la ministra para el Trabajo, María Cristina Iglesias, dictó una medida preventiva de ocupación temporal de las instalaciones, en vista de “una serie de irregularidades cometidas por la directiva contra las y los trabajadores”, según afirmó el sindicalista.

En este sentido, acotó que cuando los propietarios decidieron cerrar el complejo, lo hicieron “para evadir la discusión del contrato colectivo vencido”. La medida tomada por el Ministerio del Trabajo dictó la medida preventiva, decretando la intervención -aseguró- le puso fin a un conflicto que se extendió por 7 meses.

El mandato del Ministerio del Poder Popular para el Trabajo se ejecutó en mayo pasado. Una vez tomada la planta, se instaló una Junta Administradora, formada por un representante de las y los trabajadores y un representante del Gobierno.

“A partir de ese momento asumimos el reto de sacarla adelante con la conducción del control obrero”, rememora Escalona, quien evoca el mensaje del Presidente de la República en un evento realizado con la masa laboral de las empresas básicas de Guayana en mayo del año pasado: “Le entrego las empresas a las trabajadoras y los trabajadores para que las enrumben por el sendero del crecimiento”, dice el trabajador citando a Chávez.

Escalona hace hincapié en que durante la gestión de la Junta, se han reconocido los salarios caídos de las y los trabajadores que emprendieron la lucha laboral y en la transformación de la gestión administrativa de la fábrica.

En Grafitos del Orinoco, dice tajantemente el sindicalista, se había enquistado por décadas un sindicato vendido a la transnacional que la poseía, y que sólo discutió cuatro contratos colectivos que mantenían los salarios “en niveles miserables y sin beneficios ni aumentos”.

“No teníamos póliza de seguro de Hospitalización, Cirugía y Maternidad, no gozábamos de tickets de alimentación, ni de uniformes, ni equipos de seguridad ni herramientas. Además no hacían la liquidación de las prestaciones ni daban las utilidades anuales”, acusa.

PAGO DE BENEFICIOS

El nuevo sindicato que se constituyó en 2009 sí atiende a las y los obreros “y lucha por las necesidades y reivindicaciones”, sostiene Escalona, y como ejemplo de ello dice que “el próximo 15 de noviembre la masa laboral cobrará sus prestaciones sociales y otros derechos contractuales”.

Otro logro importante de la gestión del control obrero es el acceso a la información financiera de la planta, por parte del personal, que ahora sabe “cuánto entra, cuánto sale, cuánto se guarda y por qué”, agrega.

“En la anterior administración nuestras opiniones no eran tomadas en cuenta para las decisiones trascendentales, pero ahora éstas se dan por consenso entre todas y todos los empleados”, puntualiza.

También se minimizaron los riesgos laborales, según acota Rosa Salazar, técnica de seguridad industrial, quien afirma que han dotado de equipos a las y los trabajadores. Además, se cumple de manera oportuna con las inspecciones, que se hacen semanalmente en las tres áreas de producción.

INSERCIÓN LABORAL

El miembro del Comité de Fábricas, Área de Administración, Carlos Rondón, indicó que se ha incrementado la producción a 10.000 toneladas de antracita y grafito líquido este año, “pero se prevé que para 2011 se aumente a 30.000”.

“Esta planta es muestra de la fuerza laboral si puede manejar las empresas y hacerlas rentables; por ello creemos que el paso más importante que debe dar el Ejecutivo Nacional es la estatización de la empresa, a fin de que se ponga al servicio del pueblo y rinda frutos para las comunidades cercanas”, expresó, al tiempo que agregó que se estima que la nómina de trabajadores suba de 37 a 70 trabajadores.

PROPIEDAD SOCIAL

El mantenimiento de la planta está a cargo de una cooperativa denominada Cografideca, organización de propiedad social que garantiza no sólo la estabilidad laboral a todas y todos los trabajadores, sino también garantiza la producción a las empresas estatales que requieren el producto, debido a que este constituye una materia prima esencial para Sidor, Orinoco Iron y CVG-Venalum.

“Cografideca está obligada a realizar aportes a las comunidades cercanas a la factoría, mediante los Consejos Comunales, con los cuales se están preparando proyectos para el beneficio del Poder Popular”, dijo el sindicalista Henry Escalona.

TyF/Scarlet Soto
Ciudad Guayana