Unas 2.500 personas han sido detenidas y torturadas, desde el pasado mes de agosto, en la ciudad de Trípoli y sus alrededores por los brazos armados del autodenominado Consejo Nacional de Transición (CNT), reveló un informe de Amnistía Internacional difundido este jueves.
En el documento, titulado «Abusos a los detenidos manchan la Nueva Libia», la organización denunció que la mayoría de las personas fueron detenidas sin orden judicial «y sobre todo sin la intervención de la Fiscalía General».
De acuerdo al informe, entre un tercio y la mitad de los secuestrados son subsaharianos acusados de ser «sospechosos de ser mercenarios» del líder libio Muammar Gaddafi.
En el oeste del país magrebí los procedimientos judiciales fueron suspendidos desde que el CNT se auto proclamó como autoridad; lo mismo ocurrió en el este del país africano desde mediados de febrero.
Igualmente, señala que los niños «arrestados» han sido trasladados a centros de detención junto a los adultos; mientras que la mayoría de las mujeres detenidas, oriundas del sur de África, han denunciado violaciones por parte de sujetos no identificados que las han raptado de sus hogares.