Columna la canalla mediática|El árbol y el bosque (Opinión)

El país enfrenta una guerra económica sin precedentes, que genera escasez, inflación, “el dólar de guerra”, las colas y el descontento en la población.

El paro sabotaje petrolero (2002-2003) y el llamado a no pagar los impuestos por Julio Borges en enero de 2003, fueron formas de hacer política insurreccional por medios económicos que buscaban derrocar a un Gobierno democrático, legítimo y legal.

A partir de entonces, los poderes fácticos -económicos, financieros y mediáticos- asumían su rol político directamente, sin máscaras ni intermediarios.

Esta batalla incluyó la fuga de capitales, se estiman alrededor de 100 millardos de dólares, lo que obligó al Gobierno a crear un control de cambio en el año 2003.

En el 2008, con la crisis financiera internacional, se rompió la estabilidad en el mercado petrolero y se experimentó un baja de su precio, esta situación dio aliento al enemigo, en respuesta el Gobierno Nacional debió hacer mayores erogaciones en divisas para importar alimentos y otros productos.

Esta ha sido una confrontación continuada que a veces toma la apariencia de guerra, no convencional, y otras de política, variaciones de un mismo tema “la lucha por el poder”.

En esta guerra-política el gran ausente es el pueblo, que es a la final quien decidirá esta batalla, él es el trabajador y a la vez es el consumidor, en la medida que él se involucre, se “empodere”, se logrará la victoria.

En una guerra deben estar delimitados en el mapa el enemigo, los campos de batalla y los medios.

Es tener la capacidad para enfocar el árbol sin perder de vista el bosque.

La comunicación, ¿cuánto puede aportar?

T/ Alvin R. Lezama P.
alvin.lezama@gmail.com

La forma de ayudar a combatir esta guerra económica es con la autoproducción. Soy de los que opina que en nuestras casas donde existe un solar se puede sembrar, criar pollos ,gallinas ponedoras entre otros y este producto se puede vender entre vecinos. El problema está en que a la hora de comprar el alimento para los animales no se consigue o no lo venden a precios inalcanzables .