Los bombardeos dirigidos por la Organización del Atlántico Norte (OTAN) continúan este domingo en Trípoli, capital de Libia, y en cuatro ciudades más: Sirti, Al- Jams, Al-Assa y Gharyen, dejando numerosos heridos, según reportó el enviado especial de Telesur, Rolando Segura.
Los ataques se intensificaron durante la madrugada y la mañana. Segura informó que la agencia oficial de noticias HASA dijo que los blancos de los ataques fueron objetivos militares y civiles.
El periodista relató que «donde nos encontramos sentimos el fuerte impacto de una de esas bombas que estremeció este hotel», Rixos.
Explicó que los bombardeos son de «aviones no tripulados del tipo Depredador, tal y como lo confirmó el Departamento de Defensa de Estados Unidos».
En cuanto a la situación en Misrata (este), el periodista señaló que para este domingo la situación sigue «muy peligrosa» porque continúan los ataques de las fuerzas leales al líder libio Muammar Al Gaddafi.
Precisó en su reporte que solamente este sábado se confirmaron 24 muertos y más de 100 heridos en la ciudad en rebelión. «Entre los heridos hay un periodista francés», indicó Segura.
«Esto sucede a pocas horas de que los rebeldes declararan liberada a la ciudad (Misrata) y después del aviso del vicecanciller de Libia, Khalid Kaim, de que las Fuerzas Armadas no se retiraron, sino que suspendieron las operaciones contra los rebeldes porque tribus estaban dispuestos a resolver los problemas en 48 horas».
Ante la situación actual, Khalid Kaim aseguró que sí los rebeldes no se rinden,las tribus pelearán contra ellas, pero el Ejército no.
El periodista agregó además, que el canciller libio, Abdul-Ati al-Obeidi, viajó a Túnez con el propósito de encaminar nuevos esfuerzos para detener los ataques de la OTAN contra Libia.
Recordó que el primer Ministro Ruso, Serguei Lavrov, y el Secretario General del Comité del pueblo libio, al-Baghdadi Ali al-Mahmudi, sostuvieron un conversación vía telefónica, donde Rusia confirmó su disposición de mediar en el conflicto sí hay un cese al fuego».
El pasado jueves Estados Unidos anunció el envío de aviones no tripulados para fortalecer los ataques aéreos contra Libia, como una «modesta contribución»,