El semifondista larense, Eduard Villanueva, se toma las cosas con calma. Entiende, eso sí, que es una de las figuras principales del atletismo venezolano en la actualidad.
Su octavo lugar alcanzado en la final del kilómetro y medio en la Copa del Mundo de Daegu lo colocó entre los mejores, al convertirse en el primer atleta criollo en participar en una final mundial.
Para los Panamericanos es gran favorito. Responde con el respeto que merecen los demás competidores. «Eso se resuelve en la pista, no hay nada escrito, todos entrenamos para ganar», responde con visible madurez.
En las semifinales del torneo mundial de Daegu, corrió en 3 minutos, 36 segundos y 96 décimas. Nuevo tope nacional. En la final dejó 3:37.31. «Cada carrera es diferente y la de los Panamericanos no será la excepción, ahora mismo entreno con miras a hacer una carrera rápida, pero tras el disparo será que se decida cuál estrategia aplicar, se que tengo la velocidad para hacer un buen remate», expresa.
«Un compromiso tras otro, es lo que hago», contesta cuando se le pide hablar de Londres 2012. Adelanta que luego de los Panamericanos anotará en su agenda la carrera en los Juegos Olímpicos, cita para la cual ya tiene el cupo asegurado.
Admite saber que tiene una fuerte presión por ser el representante de Venezuela en lides atléticas, y el tatuaje de la bandera venezolana en su biceps derecho en Daegu, es muestra de su amor por el país, «que sepan que trabajo, que entreno duro para lograr satisfacciones a mis compatriotas, que hago lo posible por una buena actuación, porque es Venezuela, no es Villanueva».
Fuente/AVN