Autoridades y expertos nicaragüenses permanecen atentos ante la actividad reportada en varios volcanes del país, la cual registra una tendencia a la disminución en algunos casos.
Según divulgaron medios de comunicación oficiales, la actividad micro-sísmica en el Momotombo, situado en el occidental departamento de León, se mantiene alta con tremor volcánico, y la emanación de gases continúa estable.
El coloso de más de mil 200 metros de altura entró en erupción a principios de este mes luego de 110 años de relativa calma, y durante varios días expulsó gases, ceniza y lava, sin que representara mayor peligro para la población.
La actividad eruptiva y sísmica del cono se reinició el viernes, cuando ocurrieron explosiones de gases, así como 18 movimientos telúricos con magnitudes de 1.5 a 3.0 grados en la escala de Richter y epicentro en las cercanías del coloso.
De acuerdo con lo referido el domingo, la amplitud sísmica en tiempo real se encuentra entre moderada y alta en el volcán, con valores de 170 a 700 unidades, sin explosiones.
Mientras, la actividad micro-sísmica en el Telica (Occidente), continúa con tendencia a disminuir; y en el Concepción, situado en la isla de Ometepe, del Lago Cocibolca, se mantiene, con un gran número de eventos asociados a explosiones de gases y circulación de fluidos.
En este último cono, la amplitud sísmica en tiempo real se encuentra en valores bajos y moderados, entre 30 y 80 unidades, sin embargo, los expertos advirtieron que podrían ocurrir explosiones con salida de fragmentos de rocas en cualquier momento.
Con respecto al volcán Masaya, ubicado en el departamento del mismo nombre, los especialistas señalaron que la boca en el piso del cráter se está ensanchando y el lago de lava existente desciende lentamente.
La emanación de gases permanece estable y la amplitud sísmica en tiempo real en niveles bajos y moderados.
Nicaragua se encuentra en el llamado Cinturón de Fuego del Pacífico, una zona de más de 40 mil kilómetros que concentra la mayoría de los volcanes activos del planeta y donde suceden los eventos telúricos con más asiduidad y magnitud.