El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, criticó hoy la lentitud de las negociaciones sobre el documento final de Río+20 y opinó que un análisis microscópico del texto impide ver el cuadro general.
La actual marcha de esas discusiones envía una señal equivocada, opinó el titular de Naciones Unidas en alusión a la fuerte oposición presentada por los países subdesarrollados a las pretensiones de los industrializados con vista al proyecto.
Es el momento de enfocar lo que realmente importa, señaló en momentos en que los Estados en desarrollo tratan de evitar la imposición de los criterios y mecanismos mercantilistas contenidos en el concepto de la llamada economía verde.
El máximo responsable de la ONU inauguró este martes un debate especial titulado El camino hacia Río+20 y más allá, a un mes de esa Conferencia de la ONU sobre Desarrollo Sostenible, a realizarse en Río de Janeiro.
En su intervención, instó a repensar «nuestro actual modelo económico» y defendió «nuevas herramientas como las políticas y estrategias de la economía verde».
Insistió en que queda solo un mes para llegar a acuerdos y acciones en diferentes aspectos, entre los que mencionó trabajo decente, seguridad alimentaria y agricultura sostenible.
También enumeró el acceso universal a fuentes de energía más eficientes y limpias y a agua potable y sanidad, así como el uso, administración y conservación sostenible de los océanos.