El experimentado docente y escritor venezolano Néstor Rivero, quien trasciende en el mundo de la escritura e incursiona en la poesía, presentó ayer en el Centro Cultural Parque Central su poemario Pablo se llama la tierra al conmemorarse 40 años de la terrible pérdida del chileno amado.
La presentación se realizó en un sentido acto cultural cargado de música, poesía y latinoamericanismo, en donde varias personalidades se dieron cita para acompañar a Rivero.
Entre los presentes se encontraba El Tano, testigo viviente de la Unidad Popular de Salvador Allende en Chile, quien reside en Venezuela, y de un gran pliego de papel (preparado por él mismo) el dibujante leyó un poema de Pablo Neruda.
En la Sala Antonieta Colón del recién recuperado espacio cultural, entre otos de los cultores que asistieron, estuvo el poeta de Caricuao Efraín Valenzuela, quien realizó la lectura de un poema de su autoría titulado Una semblanza de Pablo Neruda.
Por su parte, el cantor Jesús Mijares, tomó la guitarra para interpretar varias piezas de su repertorio de ritmos latinoamericanos en compañía de las hermanas Mary Cruz, Silvia y Mercedes Mendoza del Movimiento de Artistas Revolucionarios Antiimperialistas.
En los ojos de Rivero se evidenció una profunda alegría, aseguró que viene preparando nuevas obras literarias.
Los asistentes a medida que entraban en la sala iban recibiendo de manera gratuita un ejemplar del texto.
El poemario fue publicado por copatrocinio del Instituto Municipal de Publicaciones de la Alcaldía de Caracas y la Cantv, y será distribuido por el autor en diferentes presentaciones que hará en otros estados.
Entre cocuy de penca, licor propio del estado Lara, quedó bautizado el libro.