Las mujeres que consumen bebidas azucaradas regularmente tienen un mayor riesgo de desarrollar el estrógeno dependiente del cáncer de endometrio después de la menopausia en comparación con otras mujeres de la misma edad, según un estudio llevado a cabo por la Universidad de Minnesota y financiado por el Instituto Nacional del Cáncer de EEUU.
El Instituto Nacional del cáncer de Estados Unidos informa que ya existen unos 50.000 nuevos casos de cáncer de endometrio y más de 8.000 muertes causadas por esta enfermedad anualmente. Cierto es que la mayoría de las mujeres que desarrollan el cáncer endometrial tienen más de 55 años de edad.
El estudio realizado por la Universidad de Minnesota concluyó que las mujeres que toman bebidas azucaradas con asiduidad tienen un 78% más de riesgo que las que no lo hacen, y cuanta más bebida azucarada se consuma, mayor será el porcentaje de riesgo.
Otros estudios han demostrado que el aumento en el consumo de bebidas endulzadas con azúcar ha ido en paralelo al aumento de la obesidad en las usuarias. Las mujeres obesas tienden a tener niveles más altos de insulina y de estrógenos que las mujeres de un peso normal. Los niveles elevados de insulina y los estrógenos son factores de riesgo establecidos para el cáncer de endometrio.
El equipo de investigación analizó datos del Iowa Women’s Health Study, que contenía información sobre 23.039 mujeres posmenopáusicas antes de haber sido diagnosticadas con cáncer de útero. En la documentación había datos como todos los cuestionarios sobre sus hábitos alimentarios, donde vivían y sus historiales médicos desde 1986.
Además se estudiaron sus hábitos alimenticios de los últimos 12 meses para determinar la conexión final con las bebidas azucaradas que supone el hallazgo de este estudio.
La investigación ha documentado la contribución de bebidas azucaradas en la epidemia de obesidad. Añadir demasiado azúcar puede aumentar el riesgo de obesidad, diabetes, enfermedades del corazón y cáncer.
El equipo tuvo también que valorar si el consumo de refrescos sin azúcar, bebidas dietéticas, dulces y productos horneados podían estar asociado con el riesgo de cáncer endometrial. Pero, no se identificó ningún vínculo.