Bolivia practica su disparos de media y larga distancia para su partido del sábado ante Chile, teniendo en cuenta que estos serán clave para revertir su suerte en las eliminatorias sudamericanas al Mundial de Brasil 2014.
El equipo boliviano está de último en la tabla de posiciones de la ronda premundialista con un punto en cuatro partidos, en los que ha hecho solo cuatro goles y recibido ocho. Su gran debilidad es el ataque.
PRÁCTICAS
En los entrenamientos, a tres días del juego, desde el sector medio y en la delantera, el plantel altiplánico ha ensayado disparos largos, pues el balón en la altura boliviana (3.600 m) adquiere mayor rapidez.
“Lo importante es no darle espacio a Paraguay para que pueda tirar fuerte la pelota”, afirmó el defensa Ronald Rivero, una de las piezas seguras del plantel del técnico Gustavo Quinteros, argentino naturalizado boliviano.
Los sectores de mediocampo y de ataque del onceno altiplánico están casi definidos para los dos partidos: Pablo Escobar, paraguayo naturalizado boliviano, y Jhasmani Campos serán los encargados de generar las ideas ofensivas, mientras que los dos delanteros serán Juan Carlos Arce y Ricardo Pedriel.