Brusdar Graterol es el venezolano sesenta en debutar en Series Mundiales

También es el pitcher quince en lanzar en estas lides

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Brusdar Graterol retiró a los tres hombres que enfrentó en el octavo tramo del tercer juego de la Serie Mundial y se convirtió así en el venezolano sesenta que debuta en esta instancia de Grandes Ligas, desde que lo hizo el Salón de la Fama Luis Aparicio en 1959 con Medias Blancas de Chicago; aparte de ser el lanzador quince que llega al clásico de otoño.

El primer pitcher en hacerlo fue el derecho Lester Straker en 1987 con Mellizos. Fue seguido Antonio Castillo (1993, Azulejos) y quien ganó en relevo, Francisco Rodríguez (2002, Angelinos), Ugueth Urbina (2003, Marlins), Freddy García (2005, Medias Blancas de Chicago), quien ganó como abridor el cuarto y decisivo careo como abridor, Wilfredo Ledezma (2006, Tigres), Franklin Morales (2007, Rockies, 2015, Reales), José Mijares (2012, Gigantes), Aníbal Sánchez (2012, Tigres; 19, Nacionales) 44) Félix Doubront (2013, Medias Rojas), Jean Machí (2014, Gigantes), Yusmeiro Petit (2014, Gigantes), Héctor Rondón (2016, Cachorros) y Eduardo Rodríguez (2018, Medias Rojas).

En su estreno en una Serie Mundial, el derecho apenas usó siete pitcheos, cinco de ellos en la zona de strike, para dominar en fila a Willy Adames, Kevin Kiermaier y Yoshi Tsutsugo, en el triunfo 6-2 de los Dodgers contra los Rays de Tampa Bay.

Graterol se ha destacado por sus envíos a más de 100 millas por hora y estuvo particularmente encendido en su primera presentación en la Serie Mundial. De su total de siete pitcheos, seis fueron de al menos 100 mph, destacó David Venn, en un trabajo para LasMayores.com.

Dos de esos lanzamientos fueron de 102 mph, “la segunda mayor velocidad de un envío en un partido de Serie Mundial desde que Statcast empezó a rastrear tales métricas en el 2015. El récord le pertenece al zurdo cubano Aroldis Chapman, quien alcanzó las 103.2 mph por los Cachorros contra los Indios en el Clásico de Otoño del 2016”, reseñó Venn.

Ya el año pasado el venezolano llegó a una postemporada con Mellizos de Minnesota, que lo envió este 2020 en un cambio a Boston, que lo rechazó al final al no quedar convencido de un examen médico, pero Dodgers sí aceptó el reto y hoy apunta a ser el cerrador del equipo en el futuro.

MÁS HISTORIA

También fue segundo criollo que defiende la camiseta de Dodgers de Los Ángeles. El primero fue Víctor Davalillo, una leyenda del beisbol en el país, que lo hizo en las temporadas de 1977 y 1978.

Sin embargo, ambos transitaron recorridos muy diferentes para llegar a esta instancia. Graterol, de 22 años, llegó a Los Ángeles proveniente de Mellizos de Minnesota en el cambio por el japonés Kenta Maeda, como un cotizado prospecto, con apenas 10 presentaciones en la temporada regular y una entrada en postemporada.

Davalillo lo hizo con 37 años, luego de estar tres años fuera de las Grandes Ligas y tras conseguir un segundo aire en su carrera en México, donde demostró su extraordinaria capacidad con el madero y despertó el interés de los Dodgers, que compraron su contrato de los Rieleros de Aguas Calientes para sumar un bate zurdo de experiencia en la recta final de la campaña regular.

El hombre que inventó el hit en Venezuela había impuesto una marca de hits como bateador emergente en 1970 (rota después) en la Liga Nacional y fue visto como un complemento ideal para salir desde la banca a tomar turnos importantes, junto con el toletero derecho dominicano Manny Mota.

Con esa función disputó las Series Mundiales de 1977 y 1978, aunque Los Ángeles no pudo prevalecer y perdió con los Yanquis de Nueva York en esas dos campañas. Vitico exhibió una línea ofensiva de .333/.333/.333 (de 6-2), con una empujada en cinco encuentros. Antes, había formado parte de los Piratas de Pittsburgh y los Atléticos de Oakland, en sus versiones de 1971 y 1973, que terminaron con el título de las mayores. Graterol, todavía con estatus de novato, podría conseguir su primer anillo de campeón en 2020.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Archivo CO
Caracas