Residente anunció que en el próximo concierto presentarán un nuevo disco|Calle 13 no volverá a escenarios venezolanos al menos hasta dentro de dos años

Como parte de las actividades complementarias de la inauguración de la segunda Expofonden, instalada en el paseo Los Próceres, de Caracas, para mostrar los proyectos emprendidos gracias al Fondo de Desarrollo Nacional, el pasado miércoles en la noche se presentó en el complejo ferial la agrupación Calle 13, en un concierto de entrada completamente gratuita.

Cerca de las 8:45 pm la banda boricua salió a escena con sus metales (trompeta, saxo y trombón), dos juegos de percusión, una batería, dos guitarras, un bajo y un teclado que acompañaron a las voces de René Pérez, conocido como Residente, e Ileana Cabra, en un espectáculo de dos horas cargado con las energías de los ritmos urbanos y las letras irreverentes que caracterizan a la agrupación.

El tema “Siempre digo lo que pienso”, dio inicio al concierto que comenzó «hiper», como dice otra de sus letras, y así se mantuvo con la interpretación de “El baile de los pobres”, para luego caer ligeramente con la canción “No hay nadie como tú”. Ya en calor, luego de la tercera pieza, Residente se sacó la camiseta para entonar “Vamo’ a portarnos mal”.

“Nos gusta el desorden/ rompemos con las reglas/ somos indisciplinados/ todos los malcriados/ vamo’ a portarnos mal”. Luego de interpretar esta letra el vocalista explicó que se trata de un mensaje “utilizando psicología inversa”, “porque está establecido que lo bueno es matar gente, hacer cosas malas. Entonces vamo’a portarnos mal”.

A esta altura el vocalista hizo una invitación a “los chamaquitos que andan por ahí”, para que “estudien y no los cojan por pendejos”. Igualmente censuró a quienes hacen críticas infundadas en el mundo de la farándula. “Deberían desaparecer. Aunque sé que eso le da de comer a mucha gente, pero ya es hora de que hagan un trabajo mejor”, opinó Residente.

El ritmo «hiper» descendió luego de “Ven y critícame”, cuando interpretó el tema de corte romántico, “Un beso de desayuno”, considerablemente más lento que los anteriores. No obstante, el relativo descaso duró poco y volvió a estimular los ánimos con “La bala”, dedicado especialmente al representante artístico de la agrupación venezolana Caramelos de Cianuro, Libero Iazzio, asesinado en marzo pasado.

También dedicó el tema al también asesinado Facundo Cabral y a “mucha gente, en especial a los chamaquitos que andan por ahí al garete y no valoran la vida y andan por ahí matando como si no les importara”, lamentó el cantante.

Con la canción “Pal norte”, residente pidió ayuda al equipo de producción en escenario, para lanzar agua envasada al público que en muy pocas ocasiones dejó de brincar como una masa uniforme al ritmo de la música. “Que no se beba una botella una sola persona, compártanla”, recomendó.

Continuaron con éxitos como “La cumbia de los aburridos”, “La vuelta al mundo”, “La Perla” y “Atrévete”, todas ellas con la participación del público en los coros. Con la última Residente se despidió y anunció que no tocarían más en escenarios venezolanos, al menos por dos años, cuando regresarán con una nueva producción discográfica.

A solicitud del público, Calle 13 regresó a la tarima para ofrecer “Muerte en Hawai” y “para no perder la práctica, un tema que me enseñaron a escribir ustedes, los indígenas del Orinoco y la gente de las casas de colores y las ventanas abiertas. Una canción por la unión y para decir que el pueblo manda y los gobiernos tienen que obedecer”: “Latinoamérica”.

En medio de la canción el líder de la agrupación pidió a los músicos que pararan. “No voy a seguir con la canción hasta que no saquen”, a un borracho que andaba molestando entre el público. “Dije que lo sacaran, no que lo mataran. Llévenlo con cuidado que él también debe tener madre”, aclaró. Finalmente, para concluir «hiper», como comenzó, pusieron al público a brincar con “Fiesta de locos”.

T/ Luis Jesús González Cova
F/ Andreína Blanco
Caracas