El canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, aseguró este lunes que existe un excelente ambiente en la reunión que mantienen en esta capital los presidentes de Colombia y Venezuela, Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro, respectivamente.
Excelente ambiente en el diálogo. Bien por nuestra Patria Grande, escribió Patiño en su cuenta de Twitter, en lo que constituyen las primeras revelaciones sobre el encuentro a puertas cerradas en el cual los mandatarios buscan zanjar el diferendo fronterizo entre ambos países.
Los gobernantes Rafael Correa (Ecuador) y Tabaré Vázquez (Uruguay) también son testigos de esas conversaciones, en su calidad de presidentes pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), respectivamente.
Previo al inicio de la cita que se desarrolla en el Palacio de Carondelet, sede del gobierno ecuatoriano, y que ha despertado grandes expectativas en la región, los cuatro jefes de Estado compartieron un almuerzo ofrecido por Correa.
Está previsto que al finalizar la reunión informen a la prensa local y extranjera sobre los resultados y acuerdos alcanzados.
A diferencia de Santos, quien no ofreció declaraciones a su llegada a suelo ecuatoriano, Maduro adelantó que trae propuestas concretas para tratar de solucionar el diferendo que estalló el 20 de agosto pasado, luego de que Caracas cerró varios pasos fronterizos y decretó el estado de excepción en la zona, en respuesta a un ataque de presuntos paramilitares y contrabandistas colombianos que dejó tres soldados venezolanos heridos.
Vengo con la mejor intención y la más alta voluntad de paz con Colombia, aseveró el gobernante, quien agregó que presentará a su par colombiano un plan transfronterizo que permita reconstruir y refundar la frontera de ambos lados.
También agradeció las gestiones desarrolladas por Correa y Vázquez para concretar la cumbre de Quito, en aras de preservar la unidad latinoamericana.
Celac y Unasur son el nuevo camino del continente, afirmó Maduro, quien antes de ingresar al Palacio de Carondelet saludó a la multitud reunida en la Plaza Grande, y rindió tributo al prócer independentista venezolano Antonio José de Sucre, ante la tumba que guarda sus restos en la Catedral Metropolitana de Quito.