Condecoraron a los protagonistas de 1992| Capitán Luis Valderrama: El 4-F Valencia dio ejemplo de participación cívico-militar

El coordinador de la toma de Valencia el 4 de febrero de 1992, capitán Luis Valderrama,  aseguró ayer que en la capital carabobeña se dio un ejemplo de participación cívico-militar “tal como lo predijo Fabricio Ojeda: la unión pueblo-Fuerza Armada”.

Valderrama, orador de orden de la sesión especial de la Cámara Municipal de Valencia por motivo de los 20 años del 4-F, dejó claro que en Venezuela “la Fuerza Armada y el pueblo son lo mismo”.

Desde el Teatro Municipal de la capital carabobeña, el líder insurgente alabó la unidad en Valencia, ciudad a la que catalogó como bastión de ese momento de resistencia, y en la que se mantuvieron las movilizaciones mucho después de la llamada a rendición nacional.

El “por ahora” de Hugo Chávez “se instaló en el inconsciente colectivo con una esperanza fervorosa.  Más adelante, el 6 de diciembre de 1998, la historia nos absuelve. Allí la historia nos da la razón, pues el soberano asume el reto de un cambio revolucionario, en procura del  bienestar, en procura de la igualdad; en procura, ahora, del socialismo”.

Valderrama consideró la conmemoración oportuna para “llamar a la conciencia de los revolucionarios y las revolucionarias”. Ello, a fin de continuar la cimentación de la patria nueva. “Debemos llevar sin descanso la participación protagónica a sus niveles más altos y consolidar el Poder Popular”.

El militar celebró que la Constitución Boliviana haya sido aprobada por las mujeres y hombres de Venezuela, como nunca antes ocurrió. Esa acogida constituyente es herencia “de aquel levantamiento, desde varios puntos, y desde Valencia, contra la opresión de entonces”.

ABSUELTOS POR LA HISTORIA

El acto de ayer se convirtió en “un reencuentro con los familiares de los asesinados por los cuerpos represivos, con los participantes civiles y militares” de la jornada, destacó el diputado de la Asamblea Nacional, el dirigente socialista Saúl Ortega. “Aquí nos colocamos frente a la historia 20 años después de lo que resultó una decisión correcta, pues estaban cerrados todos los caminos”, reflexionó.

La decadencia moral, ética y política del liderazgo puntofijista asfixió a la sociedad, sostuvo Ortega. De hecho, añadió, “si ese levantamiento no se hubiese dado el 4 de febrero, hubiera sido en cualquier momento”. El 4-F “abrió los cauces pacíficos a la crisis que vivía la sociedad. No tengo ninguna duda”, subrayó.

Con respecto a las críticas hechas por la oposición sobre la celebración de la fecha, Ortega indicó que esos detractores son parte de “la facción de la sociedad comprometida con el cuadro de degradación del pasado”.  En su opinión, el 4-F “ya fue reivindicado y absuelto por el pueblo” venezolano.

CIUDAD DE RESISTENCIA

El presidente del Concejo Municipal de Valencia, Pablo Montoya, reconoció a las personas que en 1992 “tomaron la decisión de acompañar la rebelión de la dignidad”. Venezuela “venía de una crisis económica, en la que 80% de la población no era tomada en cuenta, con una élite que gobernaba sin escuchar las demandas del soberano”.

El edil acotó que el “por ahora” de Hugo Chávez “se ha cumplido”, pese a que “aún perduran estructuras del pasado” en diferentes espacios. Ahora, “la riqueza de la patria, no se la lleva la oligarquía”, contrastó.

“Cuando se dio esa gesta, yo estaba con un grupo de compañeros en la Universidad de Carabobo (UC). Nuestra tarea consistía en trancar el puente de Bárbula. En ese momento desvalijamos un camión de harina de trigo. Sin embargo, nunca pensé que Valencia iba a jugar un rol importantísimo en esa rebelión. Por ello, nos honra condecorar a los protagonistas de esa fecha”, enfatizó Montoya.

José Marcano era estudiante de la Universidad de Carabobo para la época. Aseveró que no se arrepentirá jamás de haber contribuido “a la lucha por un mejor país”. Relató que la mañana del 4-F varios universitarios tomaron  camionetas con el objeto de desplazarse rápidamente por Valencia y Naguanagua durante la rebelión.

“Salimos a recorrer toda Naguanagua para incentivar a la gente. Un grupo de compañeros se trasladó hacia Canaima (zona sur de Valencia) y varios nos quedamos en las inmediaciones de la UC. Fuimos los últimos en entregarnos; no queríamos dejar la lucha. Pero entendimos que no se podía más en ese momento, y aguardaríamos por una segunda oportunidad que llegó luego”, contó Marcano.

T y F/ Luis Tovías Baciao
Valencia