A las 6:00 de la tarde de este domingo, las 22 parroquias caraqueñas se unirán en una misma tradición popular, la Quema de Judas, que este año incorpora actividades recreativas para niños y adultos en las comunidades.
En esta Semana Santa el encuentro para la popular Quema comienza con actividades desde las 3:00 de la tarde en todas las parroquias de Caracas, donde grandes y pequeños medirán sus habilidades comiendo patilla, sacando monedas de panelas de papelón, manteniendo el equilibrio al llevar el limón sobre la cuchara, jugando trompo y perinola.
Para Denny Lugo, coordinador de la actividad en el sector El Peaje de la parroquia Santa Rosalía, el propósito es «enseñarle a los niños cuáles son sus juegos tradicionales; y a que la comunidad tenga mayor participación».
En Caracas dos comunidades han dedicado años al mantenimiento de la práctica cultural, como la parroquia San Agustín, donde miembros del Centro Cultural La Alameda suman 50 años a esta tradición y en Santa Rosalía, son más de 70 años de en este encuentro popular.
LOS JUDAS DE CARACAS
Al atravesar la avenida principal de El Cementerio, parroquia Santa Rosalía, un muñeco daba la bienvenida con lentes, saco negro y camisa de cuadros. Un letrero indicaba quién era: Teodoro Petkoff.
«Esta persona traicionó las prestaciones sociales de los trabajadores de la comunidad», señaló Aníbal Zamora, habitante del sector.
La antigua casa del partido Movimiento al Socialismo (MAS) es el lugar que la comunidad escogió para quemar al muñeco.
«La primera traición de Petkoff fue a su partido MAS», dijo Zamora, para quien el dicho partido nunca representó un modelo socialista para Venezuela.
Adentrándose en las calles de la parroquia San Agustín un hombre de lentes oscuros y pantalones de jeans daba la bienvenida al ritmo de la salsa y la alegría de los ciudadanos. Este año, la comunidad escogió quemar a la inseguridad, explicó el diseñador del muñeco, Robert Torres.
«Para nosotros la figura está representada por nuestros problemas y haciendo el reclamo esperamos tener resultados positivos», manifestó.
El sector Hornos de Cal, de San Agustín, es insigne por dedicar más de 50 años a la tradición «que viene desde nuestros padres y abuelos y que no puede acabarse porque representan la esencia de nuestra cultura», indicó Víctor Sequera, coordinador del Centro Cultural La Alameda.
Ismael García, candidato por la Unidad Democrática a la Alcaldía del Municipio Libertador, es el Judas de Hornos de Cal por «saltar la talanquera y vender a la patria» destacó Sequera.
Los muñecos serán quemados a las 6:00 de la tarde en todas la parroquias de la capital. El acto estará precedido por la lectura de un testamento, escrito por un miembro de la comunidad, en el que se hacen llamados de atención a integrantes de los sectores que hayan cometido faltas durante el año pasado y también se les rinde homenaje con mensajes jocosos, por sus buenas acciones.
«El objetivo es comprometer a esas personas a que trabajen más por el desarrollo de la comunidad», explicó Vianis Márquez, coordinadora del Consejo Comunal La Nueva Voz de San Agustín.
IMPORTANCIA DE LA TRADICIÓN
Aunque la tradición tenga connotaciones religiosas, por ser Judas quien traicionó a Cristo antes de su muerte, en Venezuela tiene un significado popular y simbólico. Sus orígenes datan del siglo XV en tiempos de la conquista cuando indígenas de Cumaná sacrificaron a Américo Vespucio, navegante italiano que llegó a tierras venezolanas a mediados de ese siglo, por someterlos y asaltar sus tierras.
Bajo ese antecedente, la tradición adopta un carácter de justicia popular orientada a dar castigo a personajes que con su comportamiento han afectado la vida de una comunidad o del país.
La Quema de Judas no sólo es una tradición capitalina, estados como Lara, Aragua y Maturín también comparten esta tradición que se realiza cada año los domingos de resurrección.