Luego de conocerse el proceso de robo de la empresa Citgo Petroleum Corporation, ejecutado por autoridades del gobierno de Estados Unidos bajo el subterfugio de un procedimiento judicial para venta de activos, varios países del mundo manifestaron su rechazo a esta vil acción y en apoyo al Gobierno venezolano y al robo de sus activos en el exterior.
En este sentido, el portavoz de la Cancillería de China, Lin Jian, comunicó el rechazo enérgico de la República Popular China contra el proceso de arrebato y venta ilícita, iniciado por parte de Estados Unidos, de la empresa Citgo Petroleum Corporation, filial de Petróleos de Venezuela localizada en suelo estadounidense.
La declaración de Jian señala que la venta forzada de esa compañía constituye “un nuevo episodio de la agresión multifacética ejecutada por las instituciones de Estados Unidos contra Venezuela”.
Asimismo, el vocero reafirmó que el gigante asiático se opone a las medidas coercitivas impuestas contra Venezuela por parte del Washington. “Instamos a Washington a dejar de interferir de inmediato y por completo en los asuntos internos de Venezuela”.
Jian resaltó que Pekín siempre ha defendido firmemente la Carta de la Organización de las Naciones Unidas y las normas básicas que rigen las relaciones internacionales, y reafirmó que Estados Unidos debe ejecutar más acciones que conduzcan a la paz, estabilidad y desarrollo de los países.
Por su parte, el gobierno de Nicaragua emitió un comunicado donde comparte la indignación del Gobierno venezolano frente a las políticas antimperialistas de EE.UU. y el saqueo de los recursos de Venezuela tras la confiscación ilegal de la empresa de petróleos Citgo.
Nicaragua condena una vez más “estos absurdos atropellos” por parte de EE.UU. y su conducta filibustera.
El canciller de la República, Yván Gil, agradeció en nombre Venezuela al Gobierno de Nicaragua: “A nuestros amigos en Nicaragua, el Presidente Daniel Ortega y la Vicepresidenta Rosario Murillo, por su firme rechazo al robo de nuestra empresa CITGO, perpetrado en complicidad con el Gobierno de los Estados Unidos, la oposición venezolana entreguista y las grandes corporaciones”.