Entre 200 y 300 personas, incluidas mujeres y niños, fallecieron este lunes tras el hundimiento de una embarcación en el río Nilo, que transportaba a refugiados que huían de la violencia desatada en Sudán del Sur, desde la ciudad de Malakal, capital del estado del Alto Nilo.
El ministro de Información del estado del Alto Nilo de Sudán del Sur, Philip Jiben, declaró que “el barco se hundió con unas 255 personas a bordo y sólo dos niños han sido rescatados con vida”.
Asimismo, el funcionario agregó que los pasajeros de la embarcación “trataban de huir de Malakal, después de que circularan noticias incorrectas de que las fuerzas del exvicepresidente Riek Machar, acusado de organizar un golpe de Estado.
Durante las últimas semanas, Sudán del Sur se ha convertido en el escenario de fuertes enfrentamientos entre el Ejército y grupos opositores. De acuerdo con las cifras facilitadas por la Organización de Naciones Unidas (ONU), los choques han dejado más de mil muertos.
Por su parte, el jefe de operaciones humanitarias de la ONU, Toby Lanzer, señaló que el número de refugiados en la base del organismo ha pasado de 10 mil a 19 mil personas, en cuestión de días, debido a que «hay combates dentro y en los alrededores de Malakal».
En tanto, el Ejército indicó que también se suscitan intensos combates en el sur de Bor, capital del estado de Jonglei (este), el centro de los enfrentamientos desde mediados de diciembre; debido que los militares intentan retomar el control de la ciudad.
La crisis política en la nación más joven del mundo comenzó en julio de 2013, cuando el mandatario Salva Kiir destituyó al exvicepresidente Riek Machar, acusándolo de haber organizado un golpe de Estado en su contra.
Posteriormente, el pasado 15 de diciembre la crisis se agudizó, luego que los militares disidentes, seguidores de Machar, trataron de asaltar sin éxito el Ministerio de Defensa, la sede del partido gobernante “Movimiento Popular para la Liberación de Sudán” y el mayor almacén de armas en Yuba, la capital.
Hasta la fecha, los enfrentamientos entre ambos bandos se han saldado con más de mil muertos y al menos 400 mil desplazados, de los cuales alrededor de 50 mil se han refugiado en los países vecinos.